Martinsa-Fadesa y los administradores concursales de la inmobiliaria determinados por el Juzgado de lo Mercantil de A Coruña prevén comenzarán esta semana a trabajar en el diseño del convenio anticipado de acreedores que la empresa quiere presentar para abreviar su proceso concursal, indicaron a Europa Press en fuentes conocedoras del proceso.
La abogada Antonia Magdaleno, una de los tres administradores, indicó a Europa Press su intención de reunirse esta semana con la compañía con el fin de determinar las "cuestiones más urgentes y ponerse a trabajar".
En este sentido, la inmobiliaria que controla y preside Fernando Martín mostró, tras conocer la aceptación del concurso por parte del juez, su compromiso a "seguir trabajando junto con los administradores designados para lograr una pronta solución del concurso y alcanzar un convenio anticipado con los acreedores en un plazo razonable".
Para presentar una propuesta de convenio anticipado la inmobiliaria que controla y preside Fernando Martín debe contar con el apoyo del 20% de los acreedores. Posteriormente, una vez que la propuesta de acuerdo sea aceptada por el juez, la compañía deberá sumar al convenio al 50% de la deuda para que será finalmente aprobado.
Según la Ley Concursal la propuesta anticipada de convenio pueden presentarse desde el mismo día que se solicita concurso de acreedores hasta que expira el plazo de comunicación de los créditos (el 1 de octubre, en este caso, según lo dictado por el juez).
NEGOCIACION DEL ERE.
En paralelo, Martinsa-Fadesa y los representantes de sus trabajadores retomarán el martes la negociación sobre el expediente de regulación de empleo (ERE) de 234 trabajadores presentado por la empresa.
El objetivo de la compañía y de los sindicatos es alcanzar un acuerdo para que el juez que ha iniciado el proceso concursal de la inmobiliaria lo asuma, según indicaron a Europa Press en fuentes de la compañía y los sindicatos.
En el último encuentro, celebrado el pasado martes, Martinsa-Fadesa elevó desde los 25 hasta los 28 días por año trabajado la indemnización a los trabajadores afectados por el ajuste, el 26% del total de su plantilla.
Los sindicatos siguen rechazando esta compensación e insisten en reivindicar 45 días por año trabajado. Asimismo, piden que los despidos se realicen de forma no traumática (a través de bajas y prejubilaciones) y que vayan acompañados de planes de formación y de recolocación de los afectados en empresas del sector. También solicitan un plan de viabilidad para la empresa, con el fin de garantizar los puestos de los trabajadores que permanezcan en la compañía.
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