Estaràs, quien ha presentado esta mañana en rueda de prensa las medidas coyunturales del "Plan Anticrisis" que el PP registrará el próximo lunes en el Parlament, ha asegurado que el aumento del número de cargos, consellerias y secretarías generales durante esta legislatura ha supuesto un coste de cerca de dos millones de euros.
En este sentido, ha señalado que esos dos millones se podrían recuperar "sólo con volver a la situación previa (con el PP en el Govern)" y eliminar los nuevos cargos y departamentos del ejecutivo de Francesc Antich (con una conselleria, una secretaria general y nueve direcciones generales más que en el pasado).
Estaràs ha planteado también como otra "medida de austeridad" ante una crisis que requiere que "nos apretemos el cinturón", una congelación en un 10 por ciento del personal de la administración, excepto en los ámbitos de Educación, Sanidad y Servicios Sociales, y una reducción de la dimensión de las campañas de publicidad y propaganda del Govern.
En el apartado de medidas en los sectores productivos, la presidenta del PP balear ha planteado la suspensión de la denominada Ley de Vivienda -orientada a la obtención de suelo para construir VPO-, ya que, ha dicho, los esfuerzos deben centrarse en acabar con el ‘stock’ de cerca de 5.000 viviendas que existe en la actualidad en Baleares.
La suspensión de la llamada "Ley Carbonero", ha apuntado, permitiría que no se ocupase más suelo al tiempo que contribuiría a "activar la economía".
En el apartado de vivienda, los populares piden también que se subvencionen los tipos de interés bancario a colectivos que compren viviendas con condiciones fijadas de antemano -tales como un límite de precio o superficie-.
Además, el PP ha planteado una batería de medidas fiscales, entre ellas, la bajada del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales -pasando del 7 por ciento al 3 por ciento-, para fomentar la compra de viviendas usadas; y una disminución del IRPF en el tramo autonómico para que "se pueda llegar a fin de mes".
En este ámbito también proponen que se reduzcan las tasas aeroportuarias en temporada media y baja, e instan al Gobierno central a que baje en un 20 por ciento el Impuesto de Sociedades.
Con el fin de frenar el desempleo y ante la previsión de que en los próximos meses unas 10.000 personas perderán su puesto de trabajo en Baleares, el PP propone que se subvencione el coste de la Seguridad Social a las personas paradas que se incorporen al mercado laboral y se encuentren en una "situación grave".
Asimismo, piden que los universitarios residentes que accedan a su primer puesto de trabajo tengan una subvención el primer año en parte del coste de la Seguridad Social.
Frente a la inflación, Estaràs ha pedido que se desarrolle "cuanto antes" el Régimen Especial de Baleares (REB) para reducir el impacto de la insularidad en el coste del transporte, entre otras razones, y que se liberalicen los sectores eléctrico, de distribución de gas y de las comunicaciones.
En infraestructuras, Estaràs ha exigido que se ejecute el segundo cinturón de Palma y los accesos a la capital, además de la variante de Ferreries, ya que son "obras prioritarias".
Ha pedido también la construcción, en colaboración con el sector privado, del Hospital de Son Espases y el Hospital de Ibiza.
Estaràs reclama además al Govern un incremento de 30 millones del presupuesto destinado a promoción turística.
La presidenta del PP balear ha considerado que el plan es "perfectamente factible" y ha lamentado que Antich no se haya reunido todavía con el PP para abordar la crisis económica, a pesar de que su formación haya pedido en tres ocasiones mantener un encuentro por este motivo.
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