La directora general de Responsabilidad Social Corporativa, María Durán, subrayó ayer que las empresas más responsables socialmente y que promueven políticas de preocupación social, medioambiental, laboral y de respeto a los derechos humanos, presentan "mayor estabilidad y fortaleza" en momentos de "incertidumbre" económica, como en el caso de la desaceleración por la que atraviesa Baleares en la actualidad.
Así lo apuntó durante la presentación de un estudio elaborado por su departamento para conocer el grado de sensibilización de empresas, ciudadanos y entidades en torno a la responsabilidad social (RSC), que se basa en la contribución activa y voluntaria de las compañías en las mejoras sociales, económicas y ambientales. Tal y como afirmó, el Govern dará apoyo a partir de este año a las empresas que gestionen su actividad desde una responsabilidad social corporativa.
Según incidió, esta política permite a las empresas ser conscientes de que se trata de un valor añadido que les permite incrementar la productividad y, por tanto, hacer frente a situaciones de desaceleración, al tiempo que posibilita la conciliación de la vida laboral y familiar, el fomento de la formación continua para los trabajadores, y un mayor conocimiento de los riesgos laborales, la prevención y la salud laboral.
"Esto hace que los empleados estén más satisfechos, ya que la conflictividad es mucho más baja y la productividad aumenta de forma muy notable", remarcó la titular de Responsabilidad Social Corporativa, dependiente de la Conselleria de Trabajo y Formación. De este modo, el Ejecutivo autonómico impulsará subvenciones para planes de igualdad y conciliación, cuya convocatoria ya se ha publicado, y divulgará este sistema de gestión sobre todo en pequeñas empresas.
El estudio, cuya pretensión es hacer un diagnóstico preciso de la situación y establecer objetivos para consolidar el Sistema Balear de Responsabilidad Social Empresarial en Baleares, pone de relieve el desconocimiento por parte del 90 por ciento de empresas y población hacia este concepto. En concreto, entre quienes conocen esta política, lo identifican el 10 por ciento de la población, el 30 por ciento de las empresas y el 64 por ciento de los comités de empresa de grandes entidades.
Al mismo tiempo, Durán explicó que son las grandes empresas las que tienen mayor conocimiento del concepto de RSC y de las medidas internas a adoptar para aplicarlas, mientras que las compañías internacionalizadas son las que más integran estas iniciativas, básicamente centradas en la acción social y el patrocinio. Cabe destacar que las empresas dirigidas por mujeres y personas menores de 40 años son más sensibles y muestran un grado de implicación más elevado.
GRADO DE SENSIBILIZACIÓN
Asimismo, el 62,7 por ciento de la ciudadanía considera "muy importante" que las empresas adopten estas medidas, mientras que los sindicatos discrepan en cuanto al grado de sensibilización entre el empresariado balear sobre responsabilidad social, ya que "no cumple las leyes básicas". Por otro lado, la ciudadanía y las entidades sindicales abogan por priorizar la conciliación, mientras que las medidas que más se aplican por el empresariado es la formación y la conciliación queda en quinta posición entre sus prioridades.
En concreto, el estudio es el más completo sobre RSE que se ha llevado a cabo en las islas, con un total de 1.107 encuestas (a 680 empresas y 328 ciudadanos). "Para las empresas esta política les supone una mejora de la imagen y un prestigio, así como una forma de motivar a los trabajadores", subrayó.
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