La Fundación Titanic mostró ayer en Tarragona una inédita cartilla de navegación del tripulante del Titanic Alexander James Littlejohn, quién sobrevivió a la tragedia, que demuestra que la compañía naviera White Star Line decidió despedir a toda la tripulación cuando supo que el barco se había hundido para así ahorrarse sus sueldos.
La cartilla de navegación muestra un listado de los barcos en los que trabajó Littlejohn, principalmente como camarero y mayordomo. Constan la fecha de embarque y de desembarque.
Curiosamente, embarcó en el Titanic el 10 de abril de 1912 en Southampton, en el sur de Inglaterra, y cinco días después consta su desembarco "en alta mar". Precisamente, el 15 de abril fue cuando se conoció que el Titanic se había hundido ante las tierras de Terranova al colisionar con un iceberg.
Según Jesús Ferreiro, presidente internacional de la Fundación Titanic, el hallazgo demuestra "una leyenda que nunca se había podido confirmar" que es que la compañía "desembarcó" o lo que es lo mismo, despidió a todos sus trabajadores del Titanic, incluso al capitán, cuando supo que se había hundido, aún sin conocer si estaban vivos o muertos. La razón era seguramente para ahorrarse sus salarios.
El valor del documento se cifra en 1.700.000 millones de dólares que es lo que ha ofrecido una casa de subastas de Londres por tener esta cartilla de navegación, la única encontrada hasta el momento de tripulantes de este insigne barco.
La libreta la tenía la familia del superviviente que la ha cedido para la exposición que está recorriendo el mundo. La muestra está ahora en Tarragona, por esta razón el documento se presentó en esta ciudad. De todas formas, la cartilla encontrada aún no se exhibe porqué está pendiente de algunos trámites referentes a su seguro. La próxima ciudad donde se verá la exposición es Berlin, en Alemania.
Según explicó Ferreiro, se da la circunstancia de que el marinero Littlejohn, destinado a Primera Clase, se salvó en el bote 13, el mismo en el que sobrevivió la única superviviente aún viva que queda de la tragedia.
Según consta en su cartilla, el tripulante medía cerca de 1,50 metros de altura. Tenía los ojos grises, el pelo blanco y era de complexión fuerte. Vivía en Southampton y cobraba 3,15 libras mensuales. Su primer embarque fue en abril de 1911. Después del desastre, volvió al trabajo en octubre de 1912 y su carrera terminó en 1944.
La cartilla ha estado guardada hasta ahora por la familia, que la recuperará una vez terminado el tour de la exposición. Su adquisición, en la que no ha habido intercambio económico, fue posible tras dos años de conversaciones, según explicó Ferreiro. La cartilla consta de 26 páginas, tiene los sellos oficiales de la Autoridad Marítima Británica, esta escrito a mano, y lleva grabado el número 698750.
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