Primero fue una declaración expresa del presidente del Gobierno de iniciar un diálogo social para modificar el sistema de formación profesional, situando esta cuestión como una de las prioritarias de esta legislatura para frenar el desempleo entre los jóvenes. Tras una reunión con sindicatos y empresarios, el pasado mes de junio, José Luís Rodríguez Zapatero señaló que el modelo actual tiene una escasa valoración social, es rígido, no prepara bien a los estudiantes en lo referente a las nuevas tecnologías y no incentiva la movilidad internacional. La semana pasada, fue la secretaria de Estado de Educación y Formación, Eva Almunia, quien anunció la creación de una plataforma que permita realizar estos estudios a distancia.
Este proyecto, que se desarrollará en colaboración con las comunidades autónomas y que comenzará a funcionar antes de que acabe 2008, tendrá como objetivo ofrecer un abanico formativo más atractivo y que haga posible compatibilizar "la formación y otras actividades y responsabilidades".
Almunia señaló que la propuesta "permitirá compartir recursos ya existentes, impulsar nuevos materiales y realizar una amplia oferta de ciclos formativos, flexible y de calidad". Añadió que "representa una herramienta adecuada para alcanzar el objetivo compartido de potenciar el aprendizaje a lo largo de toda la vida".
Adaptación de los títulos
La plataforma posibilitará que el Ministerio y las comunidades autónomas “pongan en común” sus contenidos educativos ya desarrollados en un entorno virtual de enseñanza de libre distribución. Por otra parte, facilitará la creación de nuevos contenidos adaptados a las diferentes familias profesionales que serán utilizados por las Administraciones educativas. Éstas podrán, además, complementarlos con los contenidos de sus propios currículos.
La reforma de la formación profesional, según el Gobierno, deberá unir "la formación en el ámbito empresarial y laboral", de manera que "integre la experiencia laboral y la formación reglada" al mismo tiempo que garantice el conocimiento de idiomas.
En España hay aproximadamente 500.000 alumnos realizando módulos de Formación Profesional, frente al millón y medio de titulados universitarios. Una proporción inversa a la que se da en muchos países europeos, donde por cada universitario hay tres titulados en formación profesional.
Se colocan antes
La demanda de estos estudios aumenta despacio en comparación con la creciente mejora de las perspectivas laborales en los últimos años. El 41% de los titulados en FP encuentra trabajo al mes de acabar los estudios y el 76% lo encuentra en seis meses, según los últimos datos del Barómetro Nexos FP 2008. Hace unos años, este último índice de ocupación era del 55%. El de los universitarios se mantiene en el 73%, pero en muchos casos, éstos ocupan puestos por debajo de su nivel de formación. Por otra parte, los técnicos de FP, concretamente los de Grado Superior, presentan la tasa de paro más baja entre la población joven. Según los últimos datos del sistema estatal de indicadores de la educación, la ocupación en este grado entre los 25 y 34 años es del 90,3%.
El informe también reveló que han aumentado los emprendedores entre estos titulados y el 33% tiene previsto crear su propio negocio. Por otra parte, el 47% de las personas con trabajo y sin titulación piensa que si hubiera hecho algún estudio de FP, habría tenido una mejor trayectoria profesional. Sólo el 34% de los adultos sin titulación consideran que están bien preparados para la vida laboral.
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