Zapatero ha aprovechado su intervención en la clausura del Congreso del PSC en Barcelona para hacer un nuevo llamamiento tanto a los agentes sociales como a las fuerzas políticas al diálogo para superar la crisis económica.
El jefe del Ejecutivo ha garantizado que su gabinete trabaja para recuperar "cuanto antes" el crecimiento y la fortaleza económica pero mientras tanto mantiene sus medidas de apoyo a las familias, jóvenes y sectores más desfavorecidos.Su departamento trabaja, ha continuado, con "la sensatez de no hipotecar las cuentas públicas para el futuro y para las generaciones que viene", pero sin olvidar la cohesión social con la extensión de la prestación por desempleo, la subida de las pensiones y del salario mínimo, el incremento de las becas, o las ayudas a la vivienda o por nacimiento de hijos.Así, ha insistido en que cumplirá su compromiso de mantener la cohesión social con políticas sociales y de solidaridad, y por eso ha rechazado "la propuesta que hace la derecha de una reducción drástica del gasto público, que sería a costa de las políticas sociales".
"Digo sí al rigor y a la austeridad en las cuentas públicas, salvo en lo que afecta a las políticas sociales", ha agregado.Zapatero, una vez más, ha apelado al diálogo con los trabajadores y empresarios, con las comunidades autónomas y ayuntamientos, y con todas las fuerzas políticas para "recuperar lo más rápidamente posible el crecimiento económico".Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, ha pedido hoy en Sanxenxo (Pontevedra) a Zapatero que se "deje ayudar" en los temas importantes y le ha ofrecido las alternativas de su partido para paliar la crisis económica, como recordó que hará en la reunión que ambos mantendrán el próximo miércoles
En la clausura de la Escuela de Verano "Soluciones para la crisis", que este fin de semana ha reunido a los principales dirigentes del PP, Rajoy se ha mostrado convencido de que "de esta crisis se sale", pero "no se sale solo", sino "acompañado de los que hacen propuestas y medidas".Rajoy ha lamentado que el Ejecutivo haya iniciado su segunda legislatura con la "peor de las herencias que es la suya", consecuencia de cuatro años de "tancredismo" y "de vivir sin hacer nada", motivo por el que el país vive una crisis económica "seria".En estos términos ha definido los primeros cien días de Gobierno, caracterizados por la "absoluta falta de liderazgo" y por la ausencia de medidas para paliar la crisis.
También ha criticado a Zapatero por convocar "a gente de fuera", en referencia al grupo de expertos que ha llamado para la semana próxima para conocer su opinión sobre la actual coyuntura española.Según Rajoy, supone una "desautorización" del departamento de Pedro Solbes, y se ha preguntado "para qué están el Gobierno, el ministro de Economía, el de Industria y la Oficina Económica del presidente del Gobierno".
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