La primera jornada de huelga en el sector forestal de Castilla y León ha estado marcada por la denuncia presentada por la Junta tras el sabotaje contra varios helicópteros dedicados a la extinción de incendios que operan en dos de las cuatro bases de la provincia de León.
En concreto, el helicóptero de la base de Sahechores de Rueda (León) quedó inmovilizado después de que el rotor de cola fuera bloqueado con silicona, por lo que la Guardia Civil investiga estas circunstancias, según informaron fuentes de la Delegación Territorial del Gobierno autonómico en León.
Ante estos desperfectos, que se detectaron a las diez de la mañana, cuando comienza la jornada laboral en este sector, la Junta ordenó la paralización de los servicios aéreos y un mecánico revisó los cuatro helicópteros que hay en las cuatro bases aéreas, en dos de los cuales no se observó percance alguno.
El helicóptero que opera en Camposagrado también apareció con silicona, pero en la cerradura, por lo que éste sí ha podido funcionar con normalidad.
En la base de Sahechores, además de silicona en el rotor, que se consideró el suceso más grave de los ocurridos en estas bases, se rompieron los emisores y también se efectuaron pintadas.
La vicepresidenta primera y consejera de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, María Jesús Ruiz, calificó de "irresponsable" el sabotaje de helicópteros y mostró su deseo de una pronta solución a la huelga en el sector forestal.
La consejera situó el paro en este colectivo dentro del "legítimo derecho" de los trabajadores a hacer huelga, pero ha considerado "no admisible sabotear helicópteros en la base de León".
Unos 2.000 trabajadores del sector forestal privado están convocados por UGT y CC.OO. a mantener una jornada de huelga en esta comunidad para reivindicar un convenio colectivo "justo", que repetirán los próximos 23, 24, 29, 30 y 31 de julio si no alcanzan un acuerdo.
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