Según los últimos datos de las exportaciones de pizarra que maneja la Asociación Galega de Pizarristas, correspondientes al primer trimestre del 2008, las exportaciones descendieron un 12,28% respecto a las del año anterior. De las 187.039 toneladas vendidas en el exterior durante los tres primeros meses del año pasado se pasó a las 164.073 toneladas correspondientes al ejercicio actual.
La bajada se disparó en el mes de marzo, cuando las exportaciones fueron un 25,37% inferiores a las del mismo mes del año pasado. Este descenso marca una tendencia que podría continuar durante los próximos meses. “O peor aínda está por vir”, confirmó el presidente de la AGP, Jesús Vidal.
La primera medida tomada por buena parte de los empresarios fue la de eliminar las horas extras en todas aquellas empresas que las realizaban. La decisión despertó preocupación en la calle, pues muchos trabajadores las hacían, ya que suponían una ayuda para sus economías familiares. En O Barco, los comerciantes se echan las manos a la cabeza y se preparan para afrontar los tiempos difíciles que se avecinan.
“El sector acusa la crisis, pero al centrar la producción en las exportaciones, no le afecta tanto como si estuviese en función de la situación de la construcción nacional”, comenta Luis Alba, responsable comarcal de CC.OO., quien valoró positivamente la supresión de las horas extras. “No me parece mal. Antes que reducir empleo es mejor rebajar las horas. Supongo que será coyuntural”, señaló. Este sindicalista indicó que “una parte importante de los trabajadores del sector las hacía”, aunque no se aplicaban en todas las empresas.
Tampoco ve mal esta decisión de un sector de los pizarristas José Paradelo, portavoz local de UGT. “Nos parece bien, pues parece que hay poca salida de pizarra y es mejor que rescindir los contratos. Pero deberían eliminarlas todas las empresas que las hacen”, comentó. También afirmó que en esta central “nunca pusimos pegas para las horas extras, pues cada trabajador conoce sus necesidades”.
El secretario comarcal de la CIG, Adriano Brito, tras aclarar que esta central “non estamos en contra das horas extras, so cando se fan por sistema”, añadió que lo ideal sería “negociar un bo convenio para que non as houbera”.
“A situación é para preocupar, non para estar alarmados”
El presidente de la Asociación Galega de Pizarristas, Jesús Vidal, afirma que el momento actual, si bien “non é para estar alarmados, si para preocuparse”. Destaca la “caída bestial das ventas no mes de marzo” y considera que lo peor de la crisis aún no llegó.
En este sentido, apunta que “os países aos que mandamos pizarra sufriron fortes descensos na licitación de obras”. La incidencia de esta disminución en la tramitación de las construcciones en el sector aún no es excesiva, pues continúan ejecutándose los proyectos ya iniciados. Pero sí se apreciará fuertemente en un plazo de seis o 12 meses, cuando la actividad del sector de la construcción se reducirá considerablemente.
Los datos que manejan los pizarristas apuntan a un descenso de las obras que en Francia “é máis suave que en Irlanda”. Lo indicó Jesús Vidal, quien añadió que en este país la crisis de la construcción “é parecida ao caso español”.
Ante estas negras perspectivas, el presidente de la patronal de la pizarra realizó un llamamiento a las empresas, invitándolas a que “aguanten o tirón e que non se sufra moito en emprego”, dijo Jesús Vidal.
Cargando ...
Los comentarios están cerrados.