Los hechos se remontan al 25 de noviembre de 2006 cuando cuatro trabajadores murieron y otro resultó gravemente herido al declararse un incendio en la fábrica de aceites Umbria Olii, en la localidad de Campello Sull Clitunno.
Los trabajadores estaban contratados por una empresa de limpieza y mantenimiento externa a Umbria Olii.
Según los abogados de esa empresa, la indemnización que se exige se basa en que el incendio que destruyó gran parte de la compañía se originó por un uso indebido de la un generador de gas oxhídrico, usado para soldaduras con soplete.
Según los abogados de los familiares de las víctimas, la petición del propietario de la empresa, Giorgio Del Papa, busca sólo distraer la atención del proceso penal que se sigue contra él.
Los letrados de las familias de los trabajadores sostienen que lo que a "Del Papa se le olvida es que la responsabilidad de la seguridad de los trabajadores de la empresa de limpieza y mantenimiento contratada, Manili Impianti, recae también sobre la empresa contratante, la Umbria Olii".
Los principales sindicatos del país, Cgil, Cisl y Uil, han calificado de "inaceptable" la petición. "Volcar la responsabilidad sobre quien ha sufrido dramáticamente las consecuencias de la falta de seguridad ofende no sólo a las víctimas, sino a todos los trabajadores", han indicado esos sindicatos.
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