El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, rechaza lo que ‘propugnan sectores empresariales’ referente a la necesidad de flexibilizar el despido para que ‘la empresa vaya mejor’, porque, explica, ‘la causa de la desaceleración económica no tiene un origen laboral’ y, por tanto, ‘no podemos llevar la discusión a la relación laboral’.
Además, estima que cerca de 20.000 inmigrantes en paro, un 20 por ciento de los 100.000 en esta situación en España, se acogerán al adelanto de las prestaciones por desempleo a condición de que regresen a su país.
En una entrevista en el diario ‘El Correo’, recogida por Europa Press, reitera que no es necesario modificar las condiciones de despido porque ‘España ya tiene un nivel de flexibilidad suficiente’ que ‘no impide hoy que una empresa realice ajustes’.
Para el ministro, los elementos que hay que corregir son económicos, ‘como el aumento de las materias primas o la falta de liquidez en el mercado internacional’ o ‘incluso’ el modelo productivo’.
Preguntado por la reacción del Gobierno ante la actual situación económica, destaca que se tomaron medidas desde el primer Consejo de Ministros y explica que ‘la desaceleración ha tenido una rapidez imprevisible’ tras una legislatura donde los datos económicos no eran negativos, por lo que ‘nada podía presagiar una desaceleración tan rápida’.
En cuanto a los posibles pactos con el PP, especialmente en pensiones y política de inmigración, reconoce un discurso ‘nuevo’ en el partido que dirige Mariano Rajoy, pero advierte de que ‘ha sido el partido de la derecha más radical de este país y su giro al centro le puede traer problemas con su electorado’.
REAGRUPACIÓN FAMILIAR
El ministro señala, por otro lado, que las actuales normas para la reagrupación familiar son ‘excesivas’, por lo que se debe ‘restringir’ esta posibilidad para que sea ‘un derecho reglado, ceñido al núcleo familiar de pareja e hijos’.
‘Con el actual sistema corremos el riego de que el funcionamiento del Estado de Bienestar no sea el adecuado. Pero no habrá sólo restricciones, también se dará permiso de trabajo a los hijos que ya no estén en edad escolar’, añade.
En cuanto al adelanto de las prestaciones de desempleo a quienes regresen a su tierra, que serán de una media de 8.000 ó 9.000 euros, considera que ‘en su país de origen les dará para una nueva vida’ a los entre 15.000 y 20.000 inmigrantes en paro que espera se acojan a esta medida. Asimismo, indica que los inmigrantes irregulares ‘tarde o temprano tendrán que volver a su país’.
Corbacho también defiende que no es necesario subir las cotizaciones a la seguridad social ni alargar los años para el cálculo de las prestaciones de jubilación, como tampoco ve ‘razonable’ que se den prejubilaciones ‘con 50 ó 52 años’.
‘Ni una cosa ni otra. El marco que debe conformar la población activa de un país es de los 16 años a los 65, edad a la que una persona debe jubilarse’, concluye.
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