Según datos del sindicato Comisiones Obreras (CC.OO.), la siniestralidad en el sector de la construcción se ha incrementado entre estos años en España el 16,5 por ciento, al pasar de los 242 trabajadores fallecidos en 1994 -el año anterior a la transposición de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales de la Unión Europea- a los 282 empleados muertos registrados en 2006.
La entrada en vigor de la Ley no ha frenado la siniestralidad en España, y es que según los datos del sindicato, el número de fallecidos registró en 2005 su máximo de los últimos 14 años en 2005, con 315 muertes.
El año pasado fallecieron un total de 282 y en lo que va de año lo han hecho 134 personas, entre las que no se incluyen los fallecidos "in itínere" (en el camino al trabajo o viceversa), las muertes que tienen lugar pasadas las 24 horas o las relativas a los trabajadores autónomos e inmigrantes ilegales.
Por el contrario y de acuerdo con el último estudio de la Fundación Laboral del Cemento y el Medio Ambiente (CEMA), la siniestralidad laboral se ha reducido un 60 por ciento en la industria cementera y la mayoría de los trabajadores del sector.
Es más, el informe señala que el 90 por ciento de los empleados en la industria cementera considera que desempeña su labor de forma segura.
El presidente de CEMA, Dimas Vallina, explicó a EFE que el descenso de la siniestralidad en el sector se debe a "una aplicación estricta" de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, junto al esfuerzo desarrollado en materia de formación en los últimos años, y la modernización de las instalaciones e innovaciones técnicas.
Los comentarios están cerrados.