Los sindicatos UGT y CC OO negociarán un calendario de movilizaciones en el sector de hostelería para llevar a cabo en la segunda quincena de julio y en el mes de agosto, en caso de que no se produzca un acercamiento de posturas con la patronal en la reunión prevista para el próximo viernes.
Así lo indicaron ayer los dos sindicatos tras reunirse con los negociadores de la Federación Empresarial Hotelera de Mallorca (FEHM) en la sede de la Confederació d´Associacions Empresarials de Balears (CAEB), un encuentro que duró una hora escasa, debido a la disconformidad de los sindicatos con las propuestas de los empresarios.
Los temas conflictivos
Los temas más conflictivos en la negociación fueron el aspecto salarial, la reducción de la jornada laboral a 36 horas semanales y la duración del convenio colectivo, según informan los sindicatos y la patronal.
El secretario general de la Federación de Hostelería de UGT, Antonio Copete, afirmó que la propuesta económica de la patronal, con una subida equivalente a la variación real y no estimada del Íncide de Precios al Consumo, es insuficiente.
Asimismo, el responsable de hostelería de UGT aseguró que la patronal pretende eliminar algunos de los derechos conseguidos en los últimos 20 años de negociación colectiva, al plantear jornadas irregulares «encubiertas» que supondrían la eliminación del descanso de 12 horas entre las jornadas de trabajo, algo que posteriormente fue negado por los negociadores de la patronal. «Quieren tener a los trabajadores a su libre disposición», afirmó Antonio Copete.
En los mismos términos, el secretario de comunicación de CC OO,Antoni Baos, afirmó que la patronal aprovecha la negociación colectiva para plantear sus propias propuestas y no escucha ninguna de las peticiones de los representantes de los trabajadores, circunstancia que calificó de «alucinante».
Los sindicatos decidieron ayer constituir una plataforma única de negociación después de haber comenzado con una sóla por cada sindicato, una decisión que han tomado para presionar más a los empresarios con propuestas conjuntas.
Por su parte, el representante de la patronal, Carlos Sedano, redujo los conflictos a la duración del convenio, -los sindicatos plantean dos años y patronal cinco- y sobre todo al aspecto económico.
En concreto, los trabajadores solicitan una subida de sueldos del 7 por ciento en el primer año y del Índice de Precios al Consumo más dos puntos porcentuales en el segundo año de duración, un incremento que la patronal califica de «inasumible».
De hecho, el representante de la patronal afirmó que los sindicatos «no están negociando con rigor» y criticó las amenazas de huelga. «Parece que quieran generar un problema en el único sector económico que está funcionando moderadamente bien en plena temporada turística», afirmó Carlos Sedano.
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