Según informó ayer elmundo.es, la Conselleria de Sanidad cerró el viernes de forma cautelar un centro de salud situado en la calle Economista Gay tras detectarse síntomas de una enfermedad extraña -aún sin determinar- sobre nueve trabajadores de diversas categorías profesionales desde hace 25 días, según explicaron fuentes del Departamento de salud 7.
Los sanitarios, que iban desde auxiliares de clínica y celadores hasta enfermeros y médicos, presentaban un cuadro clínico de excesiva somnolencia, inquietud, miosis -contracción de la pupila-, visión borrosa, pesadez de piernas y cansancio generalizado.
Los últimos casos de esta patología desconocida, que remite a las pocas horas, se produjeron el jueves, cuando cinco operarios del ambulatorio comenzaron a sentirse mal.
Sin embargo, sólo cuatro de ellos acudieron a la puerta de Urgencias del Hospital La Fe, donde después de ser sometidos a varias pruebas fueron dados de alta al comprobar que sus síntomas remitían.
El anuncio del precinto del citado ambulatorio lo realizaron el director del Departamento 7, Melchor Hoyos, que se corresponde con el área del Hospital La Fe y el director de Atención Primaria de la misma zona, Carlos Rodrigo, quienes advirtieron del caso al Comité de Seguridad y Salud Laboral compuesto por los sindicatos sanitarios.
Los directores explicaron que el citado centro de salud se iba a precintar de "forma cautelar" hasta que se tuvieran los resultados de las pruebas que se han ido realizando desde que se detectó los síntomas patológicos entre el personal.
Mientras que se resuelve la incógnita de la enfermedad sospechosa, Melchor Hoyos, argumentó que se remitiría a todos los pacientes adscritos a este ambulatorio al consultorio auxiliar de Tendetes, ubicado en la calle Ricardo Micó.
Otro de los comentarios de los responsables del Departamento 7 fue el que desmintió que los usuarios del ambulatorio sufrieran síntomas de la enfermedad rara. De hecho, desde la Conselleria de Sanidad se afirma que la extraña enfermedad es en realidad una intoxicación alimentaria.
Se trabaja en dos líneas de investigación que tienen a los frutos secos en el punto de mira. Por un lado, unas almendras que llevó hasta el centro de salud un paciente y que podrían estar en mal estado; y por otro, un tentenpié de nueces adquirido en un horno cercano y que consumían habitualmente los empleados como almuerzo.
Sin embargo, varias vecinas consultadas por El Mundo confirmaron que algunas personas también sentían cansancio generalizado y pesadez en las piernas desde hacía meses. Las residentes del barrio ratificaron que los casos se habían producido especialmente entre las mujeres que más frecuentaban el centro de salud precintado.
No en vano, Hoyos y Rodrigo describieron que en septiembre de 2007 se registraron otros cuatro casos con los mismos síntomas en el mismo ambulatorio. "Sin embargo, no les dimos importancia porque todos, a las pocas horas remitían y ya no se volvieron a producir", explicó Hoyos.
El problema sanitario se volvió a producir hace 25 días con otros cuatro trabajadores y el jueves con otros cinco. Lo que hace un total de 13 operarios afectados si se cuentan los casos que se registraron desde hace un año.
La teoría de las almendras o las tortas de nueces, consumidas recientemente, no explicaría por tanto los casos registrados hace unos meses. En cualquier caso, parece ser que se desecha por completo una hipotética fuga de gas tras contemplarse inicialmente.
Para resolver este extraño caso sanitario se han destinado cuatro servicios: la Unidad Periférica número 3 del Servicio de Riesgos Laborales del Comité de Seguridad Laboral, el Servicio de Epidemiología de La Fe, La Unidad de Riesgos Laborales de La Fe y el Servicio de Salud Pública.
En concreto desde la Dirección General de Salud Pública ya se llevan realizando encuestas exhaustivas sobre los riesgos epidemiológicos y análisis toxicológicos que tendrán los primeros resultados durante la próxima semana.
"Hemos decidido cambiar de ubicación a los trabajadores, como medida preventiva para evitar que puedan ocurrir más casos, aunque sus síntomas sean inocuos a las pocas horas", indicó Hoyos a los asistentes a la reunión que se celebró en el Pabellón de Gobierno del Hospital La Fe ayer a la 1.00 del medio día.
Reunión para el martes
Los directores anunciaron que el próximo martes se ha convocado otra reunión en el hospital de la avenida de Campanar para describir los avances en la investigación sanitaria. En función de los resultados epidemiológicos se procederá a reabrir el centro de Economista Gay o se mantendrá el precinto y se realizarán las actividades de limpieza necesarias.
Este no es el primer caso de infección que se produce en un ambulatorio de la ciudad de valencia. El centro de salud de la calle Ingeniero Joaquín Benlloch (Malilla) presentó cuatro casos de mycobacterias de aves.
Los análisis dejaron claro que no era tuberculosis, como se sospechaba inicialmente, sino una mycobacteria atípica, por lo que no era necesario adoptar ninguna medida preventiva ya que esta bacteria tiene una capacidad "nula" de transmisión contagiosa entre los humanos.
La tuberculina realizada a una facultativo dio un falso positivo por estar infectada por esta micobacteria tipo avium como demostraron los resultados de las pruebas.
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