Decenas de trabajadores del Metal se manifestaron ayer, décima jornada de huelga en el sector, por las calles de Granada capital para reivindicar la mejora de su convenio laboral antes de la reunión prevista para mañana en el Sercla entre la Patronal y la comisión negociadora del convenio, formada por UGT y CCOO. La marcha, que partió del edificio sindical para terminar a las puertas del Ayuntamiento, transcurrió sin incidentes.
El secretario provincial del Metal de CCOO, Alfonso Ocaña, manifestó ayer en una nota de prensa su deseo de "seguir avanzando" en la negociación de un convenio "justo y digno", afirmando que "no pararán hasta conseguirlo".
En el último encuentro mantenido con la patronal se desbloquearon los asuntos relacionados con el calendario laboral, por lo que hoy las conversaciones se centrarán en la revisión salarial.
Los trabajadores exigen un seis por ciento de revisión, algo que no han asumido los empresarios que "no pueden llegar a más de un 4,8". Así los sindicatos formularon la propuesta del 5,5 por ciento y esperan conocer la respuesta de la Patronal en la citada reunión.
Hoy por la tarde se celebrará también una asamblea general de trabajadores para analizar el estado de las negociaciones, aunque, según indicó Ocaña, "la cosa no está clara, al no haberse producido todavía un avance significativo para poder indicar que esta semana pueda alcanzarse un acuerdo definitivo" que de por terminada la huelga.
Por su parte UGT calificó en una nota de "tímidos avances" las preacuerdos alcanzados en el último encuentro, en el que también se abordó la bolsa de vacaciones, y recordó que desde el sindicato consideran la negociación del convenio colectivo como "un concepto único, por lo que cualquier avance que se produzca mañana en el Sercla no tendrá valor para terminar con la huelga, excepto que se trate de un acuerdo global".
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