Según informó ayer el Gobierno de La Rioja, a través de un comunicado, este plan, que tendría un coste de unos 5,9 millones de euros, contempla distintas acciones, entre las que destacan la creación de un Sistema Integral de Intermediación Laboral con especial atención a los trabajadores extranjeros, una prospección del mercado de trabajo, un programa de inmigración y otro de formación. Todo ello con el fin de adecuar al máximo la oferta a la demanda, mejorar las labores de intermediación laboral y, con ello, aumentar las opciones de empleo de los trabajadores.
Además, Javier Erro le planteó al Ministro de Trabajo la necesidad de flexibilizar la distribución de fondos de las políticas activas de empleo y su aplicación en cada Comunidad Autónoma para adaptar los fondos a las singularidades y necesidades concretas de cada territorio, de forma que cada Comunidad Autónoma tenga capacidad de decidir qué acciones son las más adecuadas para las necesidades de su mercado de trabajo.
El objetivo final es mejorar la calidad en el empleo de La Rioja, en aspectos como la contratación estable o la formación profesional, y poder adoptar políticas que permitan anticiparse a las necesidades del mercado de trabajo de cada momento.
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