El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, criticó ayer la actitud "apocalíptica y alarmista" del Partido Popular en materia económica y de empleo, al tiempo que le acusó de arremeter contra las medidas del Ejecutivo sin esperar a ver los resultados de las mismas.
Durante la primera sesión de control al Gobierno en el Senado, Corbacho reprobó la actitud de la senadora popular Alicia Sánchez, que presentó una interpelación urgente, por describir un escenario "apocalíptico" que, según el ministro, tiene más que ver con los deseos del partido al que representa que con la realidad.
Pidió a Sánchez que no critique las medidas que ha aprobado el Gobierno y que aún no han entrado en vigor, y que centre sus esfuerzos en analizar las causas de la desaceleración económica para que el PP "sea capaz" de identificar alguna alternativa que permita afrontar la actual coyuntura.
Admitió que España, en estos momentos, "no es el país de las maravillas", pero rechazó la descripción de la senadora popular, que insistió en que España atraviesa un periodo de crisis económica con datos económicos "muy negativos".
En este sentido, recordó el paquete de medidas que ha aprobado el Ejecutivo para afrontar una etapa de menor crecimiento, que han nacido del análisis de las principales causas del ajuste económico para poder combatirlas.
Recordó también que el vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha señalado que estas medidas y los estabilizadores automáticos de la economía permitirán el retorno a tasas de crecimiento superiores, así como la recuperación del mercado laboral.
Preguntado por la necesidad de utilizar el superávit para asegurar el pago de las prestaciones por desempleo, Corbacho reconoció que el saldo positivo de las cuentas del Estado "se está agotando", pero subrayó que la posibilidad de entrar en déficit aún es bastante remota, tal y como ya ha afirmado Solbes.
"El Gobierno tiene el pulso de la situación y resolverá los problemas", aseguró el ministro, tras resaltar que su única pretensión al frente del Ministerio de Trabajo e Inmigración es conseguir "aciertos y no éxitos". "Trabajaré para conseguirlos y espero sus propuestas", indicó.
En concreto, se refirió al plan de reinserción laboral que incluye la contratación de 1.500 orientadores laborales para garantizar el trasvase de los trabajadores de la construcción que han entrado en el desempleo hacia los sectores que aún siguen creando puestos de trabajo.
"Es un plan que se basa en el sentido de la eficacia y la eficiencia", señaló Corbacho, que garantizó que será necesaria la concertación de las tres administraciones (general, autonómica y local) para conseguir los objetivos.
Recordó los datos de la última legislatura y señaló que ahora España se encuentra en una situación bastante mejor que durante el último Gobierno del PP. "Si entendemos que España iba bien entonces, y yo lo reconozco, tendrá usted que convenir que hoy la situación no es un desastre como el que usted describe", indicó.
PP: "ESTAMOS AQUÍ PARA HACER OPOSICIÓN"
La senadora popular reprochó a Corbacho que le pida al PP que analice las causas de la desaceleración porque, a su juicio, es el Gobierno y no el Partido Popular el que tiene que analizar las causas y proponer soluciones. "Nosotros estamos aquí para hacer oposición", subrayó.
Sánchez tachó de "decepcionante" la intervención de Corbacho, y le pidió que aprenda del pasado para no cometer los mismos errores en el futuro. "Ha dado muestras de que no está en condiciones de realizar esta acción de Gobierno", denunció la senadora, tras confiar en que, de ahora en adelante, las actuaciones del ministro "sean otras".
En este sentido, criticó la falta de referencia de Corbacho durante la interpelación a las políticas activas, a la intermediación y al empleo en general. "Usted es el ministro de Trabajo, déjese de demagogias", denunció.
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