El estudio ha sido elaborado el año pasado sobre una muestra representativa del 4% de la población activa, porcentaje establecido por los estadísticos como el adecuado para este tipo de informes. En total, se analizó la situación de 5.570 trabajadores . La media de horas perdidas alcanzó las 150. Al estudiar el salario medio indicado en la encuesta de coste laboral del INE, CEOE detectó que el coste laboral por hora efectiva es del 16,96 euros en Cantabria. Lo cual indica que la abstención media por trabajador le cuesta a la empresa 2.544 euros al año. Ante estos datos, el absentismo de las empresas examinadas supone un coste de 14.222.384 euros anuales. Y esta pérdida es del 4% de la población activa contemplada en el estudio.En su informe resalta que si en el análisis se hubiera trabajado sobre los datos de empresas de servicios e industriales, el resultado hubiese sido de 7,35%. Si se compara el estudio con el realizado un año antes (2006), se constata «la tendencia de incremento de absentismo que ya fue detectada entonces». Este dato viene a poner de relieve para la patronal cántabra «que es una de las causas de la falta de productividad que reiteradamente se señala como un problema general de la economía y las empresas, por la pérdida de recursos y el altísimo coste económico que supone».
Hay que destacar que en las entrevistas realizadas a los empresarios se observa la preocupación no sólo por los altos niveles, o por el aumento en comparación con el año anterior, sino también por las actitudes y valores de los nuevos profesionales, y la falta de conocimiento sobre como contrarrestrar estas nuevas formas de actuar en el puesto de trabajo y en su vida personal y cómo esto afecta a la empresa.
La enfermedad común
Según el informe la principal causa del absentismo está determinada por enfermedad común, en la suma de ambos sexos, 65% del total. En el análisis desglosado por sexos este resultado se repite, pero es un 16% superior en los hombres (76%) frente a las mujeres (60%). El problema de estos datos, factor determinante del absentismo, ‘Enfermedad Común’ está refrendado por las entrevistas realizadas, en las que se han recogido las dificultades que tienen las empresas para reducir desde la empresa (de manera exclusiva) este aspecto. Esto exigirá, según CEOE, «un trabajo conjunto entre distintos agentes que gire en torno al absentismo de tal manera que se puedan acortar plazos, que se puedan tomar decisiones sobre personas concretas, etc».
El estudio recoge también que en el colectivo de mujeres la segunda tipología que explica el absentismo laboral es la comprendida bajo la denominación de permiso retribuido (30%) frente al 4% de no justificada y el 6% de enfermedad laboral o accidente.
En el colectivo de los hombres los datos son más homogéneos en el reparto, dándose una distribución del 13% en permisos retribuidos, 4% en no justificadas y 7% en accidente o enfermedad laboral.
Entre 31 y 40 años
La franja de edad que muestra tener la mayor repercusión en el absentismo es la comprendida entre los 31 y 40 años, con un 42%, aspecto éste que se observa de forma notable también cuando se realiza el mismo análisis pero diferenciando los géneros.
A su vez, con relación a las franjas de edad en mujeres, el 50% de las horas de absentismo se producen entre los 31 a 40 años, que supone la franja en la que las cargas familiares suponen un mayor esfuerzo de dedicación personal. La segunda franja es la comprendida por mujeres de edades inferiores a los 30 años con un 31% de las horas de absentismo.
En los hombres, y comparando con los datos del 2005, se ha producido un cambio notable en los resultados. En 2005 los resultados nos indicaban que el principal colectivo por franja de edad era el de los trabajadores con edades superiores a las 51 años con el 55% del absentismo masculino. En el presente estudio esta franja de edad ha pasado a estar representada en último lugar con un 6% de la horas de absentismo.
En el estudio actual, el colectivo comprendido en la franja de edad de 31 a 40 años, es el colectivo principal en el absentismo, pasando a tener el 48% de las horas de absentismo, por delante del colectivo de trabajadores de edades comprendidas entre 41 y 50 años (31%). A modo de conclusión, sin olvidar lo comentado en el informe del estudio de 2006, el informe considera importante tener en cuenta que el éxito de la actuación en el control y la disminución del absentismo laboral está ligado al desarrollo de políticas organizativas y de gestión basadas y apoyadas en las personas. La CEOE considera importante no olvidar la nueva situación social, el cambio cultural y de valores que se ha dado en la sociedad y cómo está afectando a la gestión de las personas en nuestras organizaciones. Se deben desarrollar planes de actuación tendentes a lograr un mayor compromiso y sentido de pertenencia en las personas y de las empresas.
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