Baleares registra en lo que va de año un total de 91.548 contratos laborales, de los que 168 corresponden a personas con discapacidad, lo que supone que únicamente el 0,18 por ciento de la totalidad de los contratos efectuados en el archipiélago se hicieron a demandantes de empleo con alguna disminución psíquica y/o física, según datos de la Conselleria de Trabajo y Formación recogidos por Europa Press.
Así, del total de contratos realizados a discapacitados entre enero y marzo de este año, 70 fueron indefinidos, 93 temporales y 5 fijos discontinuos. Pese a los esfuerzos realizados por el Govern para potenciar la contratación entre entre estas personas, desde UGT consideran que todavía queda "mucho camino" por recorrer para que las empresas privadas y el sector público apueste de forma "decidida" por integrar a discapacitados en el mercado laboral.
Así lo señaló, en declaraciones a Europa Press, el secretario de Acción Sindical de UGT, Manuel Pelarda, quien afirmó que las empresas con más de 50 trabajadores fijos deberían contratar un número determinado de minusválidos, algo que no se cumple en ninguna parte del país, lo que provoca que los minusválidos tengan "muchas dificultades" para encontrar un empleo fuera de los ámbitos de la escuela taller o empresas de inserción.
Por ello, abogó por la firma de un gran pacto en el ámbito de la administración autonómica, insular y municipal, para que las instituciones y empresas públicas fijen un número "mínimo" de contratados disminuidos. Otro pacto debería afectar a los agentes sociales y patronal, para que las empresas de las islas se comprometan a contratar un porcentaje, del orden del 3 o 4 por ciento, de trabajadores disminuidos.
"Ello supondría un gran paso hacia adelante", señaló, tras indicar que si bien los jóvenes, mayores de 50 años, inmigrantes y las mujeres tienen también dificultades para encontrar un empleo, las trabas para los discapacitados son "mucho mayores". Son, dijo, "los grandes olvidados del mercado laboral", puesto que la empresa primará siempre la "perspectiva económica frente a la social".
Desde su punto de vista, no habrá una "actuación real" para integrar a discapacitados en el mundo del trabajo hasta que políticos y empresarios adopten medidas y compromisos en esta línea. para disminuidos
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