Fuentes policiales han informado hoy de que los detenidos se dedicaban a realizar ofertas de trabajo fraudulentas a varios ciudadanos extranjeros, previo cobro de importantes cantidades de dinero.
Hace unas semanas el Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación de la Jefatura Superior de Policía de Asturias comenzó una investigación centrada en siete denuncias interpuestas por varios ciudadanos de origen senegalés y marroquí en la que manifestaban haber sido estafados por un abogado de Oviedo que les había prometido regularizar su situación o la de un familiar en España.
A medida que la investigación fue avanzando, se descubrió que todas las víctimas habían mantenido contacto directo o indirectamente, a través de amigos o conocidos, con una vidente cubana, con domicilio en Oviedo, la cual además de sus servicios como santera, les había informado de la existencia de una abogado llamado "Enrique" dedicado a la gestión y tramitación de expedientes de extranjeros, que podría conseguirles permisos de residencia y trabajo en nuestro país. Al final de cada sesión les proporcionaba su dirección y teléfono.
Una vez que se citaban con "Enrique", esté les manifestaba que era abogado y que podía agilizar la tramitación de los "papeles" en la Oficina Única de Extranjeros, ya que él mismo trabajaba en esas dependencias, en concreto en la "mesa seis" atendiendo al público, y les aseguraba la consecución de la documentación solicitada en un plazo no superior a veinte días.
Asimismo, les comentaba que tenía muy buena relaciones tanto en Inmigración en Madrid, como con un policía de Extranjería, informándoles que por todas las gestiones solo deberían abonar la "módica" cantidad de 3.000 euros en dos pagos, uno al inicio y otro a la finalización de los trámites.
El primero en descubrir la presunta estafa fue un senegalés que había contactado en el "abogado" para conseguir regularizar la situación de su hermano, que posteriormente iba a ser contratado como oficial de peón de la construcción en la empresa en la él que ya trabajaba.
Este hombre, tras comprobar que no existía ningún expediente abierto a nombre de su hermano, se había dirigido al domicilio del supuesto letrado para reclamarle la devolución de su dinero, entregándole éste un cheque, que resultó no tener fondos, además de amenazarle gravemente.
El Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Documentación de la Jefatura Superior de Policía de Asturias, tras contactar con los Colegios de Abogados de Oviedo y de Gijón, comprobó que no existía ninguna persona colegiada con los datos facilitados. Asimismo se constató que en la Oficina Única de Extranjeros no existía ninguna persona llamada "Enrique" y que si siquiera existía la "mesa seis".
Finalmente, la investigación determinó, que la vidente cubana estaba actuando como "madrina" mostrándole el "verdadero camino", en este proceso de iniciación al mundo de la videncia y la santería. El propio Enrique, alumno aventajado, había montado un santuario en su domicilio y se estaba dedicando a la videncia y al tarot.
El día 22 de abril el Grupo I de la Brigada de Extranjería y Documentación detuvo a E.C.A, de 34 años, nacido en Oviedo y con domicilio en esta ciudad, y a CN.M.L.L., mujer. de 52 años, nacida en Cuba y con domicilio en Oviedo. El hombre fue detenido como presunto autor de los delitos de estafa, intrusismo profesional, falsificación documental y amenazas y la mujer está acusada de un delito de estafa.
A E.C.A. le fue incautada numerosa documentación falsa sobre solicitudes de Autorización de Residencia temporal y trabajo, así como ofertas de empleo para diversos trabajadores extranjeros.
Tras ser puestos a disposición judicial se decretó libertad con cargos.
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