Formar a los escolares en la cultura de la prevención de riesgos laborales, de forma que ellos mismos conciencien a sus padres. Ese es uno de los objetivos de una campaña puesta en marcha por la Junta para luchar contra los accidentes laborales desde el ámbito escolar.
Dentro de los cursos promovidos por el Gobierno regional para prevenir los riesgos laborales se ha incluido una campaña específica, que este año llegará a más de 1.500 alumnos de corta edad.
La campaña, denominada ‘A salvo’, cuenta con la participación de 18 monitores que impartirán clases de prevención de riesgos en 36 colegios de la provincia. Los datos de esta iniciativa, que ya se ha puesto en marcha en cursos pasados, fueron facilitados ayer por el máximo responsable de la Junta en Zamora, Alberto Castro, que se desplazó al colegio Alejandro Casona para asistir a uno de los cursos.
Castro aseguró que una de las prioridades de la Junta es la reducción del número de accidentes laborales, para lo que ha desarrollado diversas campañas, entre ellas la dirigida a los escolares, que es ‘una de las más importantes’. Se trata de una campaña que promueve la formación y la orientación para que los niños adquieran una cultura preventiva y conseguir así que ‘la prevención sea un bien social’.
Para ello, los monitores utilizarán juegos y diverso material didáctico para inculcar la cultura de la seguridad laboral a más de 1.500 alumnos, para que luego trasladen a sus padres los conocimientos aprendidos en materia de seguridad laboral.
Castro resaltó lo acertado de esta campaña y recordó que ha llegado a ser premiada por la Unión Europea por su utilidad. El delegado territorial de la Junta confía en que esta medida consiga reducir los accidentes laborales en la provincia.
Los datos facilitados en la presentación de la campaña indican que en el año 2006 hubo dos accidentes laborales mortales en la provincia, mientras que en el 2007 ascendieron a siete. Este año, por el momento, no se ha registrado ningún siniestro con víctimas mortales.
Alberto Castro también se refirió a la petición de los profesores del colegio de educación especial Virgen del Castillo para poder impartir las clases el próximo curso en jornada continua, como en el resto de centros públicos de la provincia. Castro rechazó esta petición por ‘un planteamiento de calidad’. Recordó que se trata de un centro de educación especial, con características distintas al resto de colegios, y se escudó en ‘los técnicos’ de la Junta de Castilla y León para rechazar la jornada continua.
El delegado territorial explicó que el Gobierno regional ha establecido que ningún centro de educación especial cambie el horario por el momento. A su vez, el director provincial de Educación, Pedro San Martín, recordó que la propia normativa vigente desestima las pretensiones de los profesores del Virgen del Castillo.
En Castilla y León, actualmente existe un colegio de educación especial, ubicado en Segovia, que ha implantado la jornada continua. Castro justificó esta excepción porque el horario se estableció hace ya doce años, cuando aún la Junta de Castilla y León no tenía las competencias en materia de Educación.
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