El ex-ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, estimó que, a pesar de la reducción a la mitad del superávit y de que las medidas anunciadas para impulsar la economía supondrán una minoración de los ingresos del Estado, "es posible que acabemos el ejercicio de 2008 con superávit". Además, se mostró convencido de que pese a la desaceleración económica no habrá una destrucción neta del empleo.
"Las medidas de choque supondrán una minoración de los ingresos del Estado, pero no al punto de eliminar el superávit previsto", explicó Caldera al ser preguntado por la reducción de ingresos de los presupuestos del Estado, cuyo superávit se ha visto reducido de 6.747 millones de euros en marzo de 2007 a 3.276 en el cierre del mismo periodo de este año.
Estas cifras, facilitadas ayer, no incluyen el impacto que tendrán en las cuentas públicas las medidas aprobadas el pasado viernes por el Gobierno, entre ellas la devolución de 400 euros del IRPF a trabajadores, pensionistas y autónomos.
Caldera, en declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, predijo que tampoco se producirá una destrucción neta de empleo: "La destrucción de empleo significa bajar en el número de ocupados. Aunque suba transitoriamente el desempleo, no quiere decir que se destruya el empleo, quiere decir que las personas que se incorporan en ese momento al mercado laboral no encuentran trabajo", explicó.
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