La empresa onubense Astipesca, propietaria de nueve barcos que llevan inmovilizados más de un mes en el puerto de Santo Tomé (Gabón), ha presentado una suspensión de pagos que afecta a unas 350 personas, entre personal de tierra y tripulantes.
Los empleados han manifestado que "era algo que se veía venir". Al hecho de que llevaban dos meses sin cobrar, se une que se habían producido varios avisos de corte telefónico. La precaria situación económica había impedido que los buques pudiesen repostar y volviesen a casa.
El expediente de suspensión de empleo afecta a las empresas que dependen del propietario de Astipesca, como son Gabrielitos y Gabrielitos del Mar , frigorífico del Muelle de Levante de Huelva.
El grupo cuenta con cuarenta barcos, de los que diez están en Las Palmas de Gran Canaria y nueve en la costa africana, y también trabaja en países como Guinea, Senegal, Marruecos, Mauritania y Angola.
La tripulación gallega y andaluza de las naves inmovilizadas ya cuenta con los billetes de avión para regresar este jueves a Huelva, puerto base de los buques y la armadora. La firma les ha reembolsado a todos ellos el dinero esta mañana el coste de los pasajes.
Así se lo explicó a Europa Press el presidente de la Asociación Española de Titulados Náutico Pesqueros (Aetinape), Xosé Manuel Muñiz, después de que la empresa armadora Astipesca confirmase la compra de los billetes al subdirector general de Acción Social del Instituto Social de la Marina, José Manuel Pérez.
El avión partirá del país africano al aeropuerto luso de Faro. Una vez en la ciudad onubense, cinco miembros de la tripulación gallega regresarán a sus respectivos hogares de Galicia situados en Pobra do Caramiñal, Noia y Pontecesures. Otros dos se quedarán, uno en Huelva, donde tiene fijada su residencia; y otro se trasladará a Canarias.
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