A partir de esta semana, más de cinco mil trabajadores del sector del transporte de mercancías estarán pendientes de las negociaciones que sus representantes sindicales realicen con la patronal del sector para renovar el convenio colectivo.
Los “caballos de batalla”, en esta ocasión, serán el incremento salarial para el que la plataforma unitaria solicita un 7% y la adhesión a su convenio de las empresas de que se dedican a los servicios profesionales de grúa (siempre en el sector mercancías).
En la mesa se sentarán once representantes de los sindicatos (ocho de CCOO, cuatro de UGT y uno de USO) enfrente de otros once de los empresarios (ocho de la Federación Balear de Transportes y tres de la Federación Balear de Pimem).
Pep Ginard, representante de la negociación colectiva de la Federación de Comunicación y Transporte, se muestra satisfecho de que las tres centrales sindicales hayan alcanzado un acuerdo para presentar una plataforma unitaria a la que la asamblea de trabajadores otorgó su conformidad esta semana. De todos los puntos a negociar destacan para CCOO, y también para los trabajadores, el incremento salarial, el acuerdo para las penalizaciones de los puntos del carnet de conducir y el horario de trabajo.
Respecto al incremento salarial, las centrales sindicales han decidido solicitar un siete por ciento para “poder equiparar nuestros salarios a los del sector de carretera porque en estos momentos estamos por debajo”, señala Pep Ginard.
La aplicación de la retirada de puntos del carnet de conducir por infracciones de tráfico, es otra de las cuestiones que piensan los sindicatos incluir en el convenio. Al respecto, Ginard señala que ya han alcanzado el acuerdo de instituir una póliza que cubra la recolocación laboral tras los seis meses de sanción con la percepción del salario íntegro. Si la sanción alcanzara un año de retirada del permiso de conducir se le concedería una excedencia especial de hasta un año cubierta con un seguro general que supondría el desembolso para el trabajador de 50 euros anuales. Naturalmente serán de aplicación cuando los motivos de las sanciones se deban a la propia actividad y no a imprudencias de los conductores
La jornada laboral es otra de las cuestiones que se van a negociar. Las centrales sindicales esperan conseguir que se regule el horario de trabajo de este sector entre las 08.00 y las 12.00 y de las 14.00 a las18.00 horas de lunes a sábado. En la actualidad la jornada laboral de este sector no está tipificada y asciende a 1.800 horas anuales. La pretensión es reducirla a 1.792, ocho menos, según señaló el dirigente de Comisiones.
Las centrales esperan lograr una negociación con los empresarios “tranquila y pausada” pero no descartan las actuaciones necesarias para acercarse al logro de los objetivos que se han marcado. El principal: firmar un convenio por dos años en lugar de por tres como se vino haciendo hasta ahora.
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