UGT de Cataluña renovó ayer su exigencia de tener un IPC catalán en todos los convenios, como un instrumento efectivo para corregir la pérdida de poder adquisitivo, así como en las cláusulas de revisión salarial.
En un comunicado, el sindicato considera que, según los cálculos que ha hecho, la tasa de variación interanual del IPC de los trabajadores con sueldos mileuristas llega al 4,9 por ciento, cuatro décimas por encima de la cifra oficial del IPC de marzo.
UGT apoya la creación de un observatorio de precios de Cataluña, anunciado por el departamento de Agricultura, Alimentación y Acción Rural que, entre otras funciones, habría de exigir un control riguroso de la traslación del aumento del precio de las materias primas sobre el precio al consumidor.
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