Alrededor de 400 trabajadores de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) improvisaron de nuevo hoy una concentración en la Plaza Mayor de la capital que derivó en una "mini asamblea" donde determinaron acudir a las oficinas de la empresa, ubicadas en el Cerro de la Plata, según indicó uno de los miembros del Comité de Empresa, Alfonso Araque.
Araque explicó a Europa Press que tras la decisión tomada, fueron andando hasta la Carrera de San Jerónimo, pasando por la Puerta del Sol, donde la Policía Municipal les impidió el paso. Así, después de otro intento por la calle Alcalá y Gran Vía, y al temer cargas policiales, los manifestantes decidieron finalmente tomar el Metro hasta Pacífico.
Una vez en las oficinas, el equipo de seguridad intentó evitar que los trabajadores entraran porque en ese momento estaba reunida la Comisión negociadora. Sin embargo, los esfuerzos fueron en vano porque los empleados, la mayoría conductores y procedentes de los talleres, consiguieron entrar hasta el patio principal, y allí, entre pitos y gritos, pidieron una "solución inmediata al conflicto".
Según Araque, durante más de una hora pidieron una negociación para el convenio y la dimisión del director general gerente de la EMT, Javier Conde, "que lleva desaparecido mucho tiempo".
Esta no es la primera vez que los trabajadores improvisan una concentración y salen a la calle, coincidiendo con los paros convocados que hoy llegan a su 13ª jornada. El miércoles pasado, un grupo inferior al de hoy, con cerca de 300 empleados, se manifestaron ante la sede del Partido Popular, en la calle Génova, para pedir la intervención de los responsables del Ayuntamiento, pertenecientes a este partido, en el proceso negociador.
El próximo lunes, coincidiendo también con paros totales, los trabajadores se manifestarán a las 18.00 horas desde Atocha hasta Cibeles, esta vez con los permisos necesarios para ‘ocupar la calle’.
PRIMEROS PAROS SIN INCIDENCIAS
La movilización de hoy tuvo lugar justo después de terminar la primera tanda de paros parciales, donde, según fuentes de la EMT consultadas por Europa Press, no se registraron "apenas" incidentes. Así, contabilizaron lanzamientos de huevos en tres autobuses en la zona de Lucero, una luna rota en la línea 8 a su paso por Vallecas, y dos espejos retrovisores pintados.
Además, los retrasos en las incorporaciones de las líneas mantuvieron la media de jornadas anteriores, con demoras de entre 60 y 90 minutos.
Durante la mañana de hoy, los sindicatos se reunieron con la Dirección de la empresa, en uno de los encuentros habituales convocados desde que comenzó el proceso negociador. Sin embargo, ésta se suspendió de mutuo acuerdo enseguida sin acercar posiciones "para hacerlo en buenas condiciones" el próximo martes.
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