El secretario general de UGT de Catalunya, José María Álvarez, ha propuesto «criminalizar públicamente a las empresas que discriminan a la mujer» como medida de carácter «ejemplificador» para avanzar en la igualdad laboral entre hombres y mujeres. Asimismo, pidió a la Generalitat que actúe para reconducir la situación, especialmente en el caso de las pymes, que escapan
al ‘control’ sindical.
En una entrevista a Europa Press, Álvarez consideró que el plan de la Generalitat que subvenciona con ayudas a fondo perdido a las empresas que promuevan planes de igualdad, «va en la buena dirección», pero indicó que, «si de verdad quiere dar un vuelco, la administración tendrá que hacer algo más».
Según Álvarez, los sindicatos pueden hacer «algunas cosas» allí donde están presentes, pero «desgraciadamente hay algunos sectores en los que la presencia sindical no es tan importante», especialmente en las pymes, por lo que la administración «tendrá que actuar en estos sectores». «Esta lucha se debe llevar hasta el final», dijo. *
El dirigente ugetista pidió por ejemplo «un análisis a fondo de por qué en un sector como el comercio, en el que el 70% de los trabajadores son mujeres, en las labores de dirección este porcentaje se invierte y, justamente, el 70% son hombres».
«No sirven excusas de mal pagador, prosiguió, como estas teorías de las empresas acerca de que las mujeres no quieren adaptarse a la jornada. Si las mujeres no quieren adaptarse a la jornada, que la jornada se adapte a las mujeres».
Opinó que en la primera fase de despliegue de la Ley de la Igualdad, aprobada por el Gobierno central, «hemos de ir más allá de la fase de la presencia de la mujer en los consejos de administración», que, no obstante, consideró «muy bien y muy importante». En este sentido, recordó que en las categorías profesionales inferiores «se produce una situación insoportable».
PYMES: SE CUMPLE MENOS LA NORMATIVA LABORAL.
El líder de UGT en Catalunya señaló que «justamente en las pymes es donde menos se cumplen las normativas laborales, donde menos se aplica el convenio y donde hay una situación de más precariedad». Por ello, es en estas empresas en las que «el sindicato debe hacer un esfuerzo mayor para estar presente», aseguró.
Explicó que, en los últimos 12 meses, el sindicato que dirige ha tenido un incremento neto de la afiliación de más de 10.000 trabajadores, «básicamente de la pyme». Sin embargo, comentó que es «complejo» iniciar la actividad sindical en este tipo de empresas.
«No esperamos resultados a muy corto plazo. La organización del sindicato está en un trabajo de especialización constante para dar respuesta a los problemas de la pyme, pero será un camino largo». «En todo caso yo creo que este debe ser una de los retos del sindicato», indicó.
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