Tatum, consultora española de gestión comercial y de marketing, presenta su último cuaderno de opinión “Cultura de Conciliación, Un nuevo paradigma en la dirección de personas”. El informe analiza la conciliación desde sus diferentes ópticas (institucional, personal y empresarial), y además ofrece un nuevo paradigma en los modelos de dirección de personas.
El informe pone de manifiesto que la conciliación de la vida profesional y personal es un tema de creciente relevancia y que se está transformando en un auténtico reto para las estrategias de recursos humanos de la empresa privada y las administraciones públicas, así como para las personas.
Los expertos de la consultora han señalado que el informe pretende aportar valor, conocimiento y experiencia a las empresas, ofreciendo soluciones a las múltiples preocupaciones que les surgen a la hora de plantearse la conciliación.
Una visión global
Desde las instituciones existen diversos esfuerzos para consolidar la sociedad del bienestar. El Estado decide apostar por medidas que ayuden a garantizar la igualdad de oportunidades, premisa indispensable para poder hablar de conciliación.
En este sentido, se están tramitando diferentes medidas de acción positiva con rango de ley como la Ley de Igualdad de Género y la Ley de Dependencia. Por otro lado ha puesto en marcha el Plan Concilia. Este supone un paso más de la Administración Pública para demostrar los derechos y oportunidades e impulsar un cambio global en el resto de la sociedad. Este Plan supone para más de 500.000 trabajadores y trabajadoras de la administración una medida concreta de mejora para sus condiciones de vida y de trabajo, sobre todo en lo referente a flexibilización horaria.
El informe, también, hace referencia a la Fundación + Familia, organismo impulsor de un esquema privado de certificación EFR (Empresa familiarmente responsable), que busca dar respuesta en materia de responsabilidad y respeto a la conciliación de la vida familiar y laboral, y crear un sello similar a los de calidad y medioambiente que distinga aquellas empresas que sean verdaderamente activas en este campo, para potenciar su imagen como empleadores.
Según el informe, la conciliación vista desde la propia persona debe ir más allá de la familia y el trabajo. Se trata de alcanzar el equilibrio entre las distintas dimensiones que componen la persona: profesional, familiar, personal y de pareja.
Eugenio de Andrés, socio director de Tatum, autor del informe y del libro sobre la conciliación La Pirámide Hueca (ESIC Editorial) destaca “Nosotros mismos somos la base de la conciliación, la clave del equilibrio es reflexionar sobre el equilibrio de nuestras dimensiones y cambiar de actitud. Las empresas, además, deben facilitarles el camino, bien por convicción o bien por interés mutuo”. Por otro lado, enfatiza de Andrés, “es estupendo que las empresas y las Instituciones nos ayuden a disponer de más tiempo libre, pero depende únicamente de nosotros la forma de invertirlo”.
En este sentido, el informe expone el concepto de profesional multidimensional, acuñado en el libro La Pirámide Hueca, que consiste en ver al trabajador como la unión de sus diferentes dimensiones: única forma de comprender sus diferentes realidades y problemáticas, todas ella interrelacionadas e interconectadas.
Desde el mundo empresarial, se observa que en un mercado tan competitivo como el actual, para conseguir los objetivos empresariales resulta imprescindible que éstos estén alineados con los objetivos de sus profesionales. Para ello, el único camino de futuro ante las empresas es ayudar a sus empleados a conciliar su dimensión profesional con sus dimensiones personales. Estas acciones inciden directamente en el aumento de la productividad y en la vinculación de los trabajadores con su empresa.
Según los responsables de Tatum, es necesario que las organizaciones migren de una “cultura del esfuerzo” a una “cultura del resultado”, donde lo importante no es que las personas estén muchas horas en la oficina, sino que se sientan identificadas con los objetivos de la empresa y que pongan toda su voluntad para conseguirlos. Lo que importa es enfocar todos los esfuerzos en la consecución de los objetivos predeterminados, con un alto nivel de calidad marcado y en los tiempos esperados.
Este modelo supone en España un cambio cultural demasiado brusco para gran parte de las organizaciones. Para poder evolucionar hacia una cultura de resultados, es necesario apostar por la cultura del compromiso, donde la confianza es la clave. Es por tanto necesario que la empresa (sus directivos), cambie su visión sobre las personas que trabajan en ellas, contemplando su pirámide completa en lugar de una sola de las caras (la profesional), y de está forma se dará el primer paso para: alinear a las personas con la organización; motivar e implicar a las personas y mejorar los resultados.
Es en este entorno, en el que confluyen todas estas circunstancias, donde nace la conciliación, como iniciativa de las instituciones, como solución para las personas y como oportunidad para las empresas.
Un nuevo modelo de dirección de personas, la dirección V.I.P.
Tatum ha diseñado un nuevo modelo de dirección de persona: la Dirección VIP “Very Important Persons”, apuntando a un factor indiscutible en las organizaciones modernas en las que su principal activo son sus profesionales. Este nuevo modelo es hacia el que deben evolucionar las organizaciones, para aprovechar la conciliación como un elemento de gestión de personas que ayude a la empresa a conseguir sus objetivos de negocio.
Otra acepción de la Dirección VIP hace referencia a “Visión Integral de las Personas”, es decir, al concepto de profesional multidisciplinar y a la necesidad de contemplar las diferentes facetas de las personas, y de integrarlas dentro de la estrategia de dirección de personas.
Este modelo se apoyo en tres pilares fundamentales que tienen relación con la visión global de la persona, con una dirección global y un enfoque de eficiencia global para la consecución de objetivos. A través de estos puntos se puede alcanzar un compromiso sostenible entre la persona y la empresa, que garantice la compatibilidad y la consecución de objetivos de ambos.
Este modelo se ha probado con éxito en diferentes organizaciones que han mejorado su productividad y reducido sus costes de rotación y absentismo.
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