La reunión que ayer lunes debían haber celebrado en Barcelona la dirección de Volkswagen y los sindicatos, para tratar el futuro industrial de la planta de Landaben, en Pamplona, no llegó a producirse por diferencias entre UGT y CCOO, según han informado fuentes sindicales.
La empresa optó por no celebrar la reunión, a la que no se presentó CCOO, al considerar que no estaba tratando con la mayoría del comité de empresa de Landaben.
Esta reunión debía servir para que la empresa presentase un plan industrial para Landaben que garantizase su futuro, pero la multinacional decidió no revelar sus planes ante la división sindical.
CCOO, sin embargo, no asistió a la cita porque asegura que todo diálogo ha de producirse en la mesa de negociación del convenio que se está negociando desde hace dieciocho meses.
En el comité europeo de VW que se había celebrado hace dos semanas se había acordado esta reunión como una manera para que se desbloquease el convenio de Landaben, que afecta a 4.000 trabajadores de esta planta y que es el más importante de Navarra en el ramo industrial.
UGT es partidaria, aunque no le gusta la última oferta que ha presentado la empresa, de que ésta se someta a referéndum, pero con diez miembros en el comité, pese a ser el sindicato con más representantes, no tiene la mayoría necesaria para que se permita votar a los trabajadores, un opción que bloquean el resto de fuerzas sindicales (CCOO, LAB y CGT).
CCOO cuenta con siete miembros que, sumados a los diez de UGT, sí que darían una mayoría suficiente, y precisamente la presentación del plan industrial debía servir para acabar con esta situación de bloqueo.
La negociación del convenio, actualmente en punto muerto, ha supuesto diversos paros y protestas, por lo que este año se han dejado de fabricar 7.000 coches.
Landaben es la planta europea que, junto con la de Bruselas, fabrica el modelo Polo, y el temor de los sindicatos es que ante esta situación VW desvíe parte de la producción fuera de España, una amenaza que la multinacional alemana ya ha puesto sobre la mesa.
Si bien VW no avanzó ayer en Barcelona cuáles eran sus planes para Landaben, hace dos semanas el grupo ya desveló que pensaba instalar nuevas fábricas en Rusia.
El bloqueo del convenio, que se ha de firmar para tres años, está paralizado desde el pasado 27 de marzo, y las partes por ahora no llegan a un acuerdo. EFE.
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