El colectivo de inmigrantes se ha convertido en una pieza esencial del funcionamiento del mercado laboral español. Prueba de ello es su crecimiento imparable entre los trabajadores de nuestro país, habiendo aumentado un 57,1% en 2005, con respecto al año anterior, hasta 1.688.598 inmigrantes. El proceso de regularización de inmigrantes realizado por el Gobierno en 2005, ha sido clave en el fuerte incremento de la afiliación de este colectivo, ya que un 36,3% de las nuevas altas de 2005 correspondieron a personas que legalizaron su situación. En total, en el pasado año trabajaron en España un total de 2.191.000 extranjeros, que representan el 11,3% del total de los contratados.
En el caso de los empleados por el Grupo Adecco, este significativo porcentaje es aún mayor: el 14,57% de los 153.497 trabajadores en 2005 fueron inmigrantes. Esta cifra supone un 30% más que en el año anterior y supera las previsiones de crecimiento del 25% pronosticado.
Sin embargo, este aumento no se ha debido al proceso de regularización llevado a cabo en 2005, ya que la mayoría de expedientes presentados para la normalización no fueron resueltos hasta después de junio. Además, hay que resaltar que las empresas de trabajo temporal no tienen acceso a los dos sectores que han contratado a más del 50% de los extranjeros regulados: la construcción y el servicio doméstico.
La razón principal de este fuerte incremento de la contratación de inmigrantes en Adecco se debe a que dicho colectivo utiliza a las empresas de trabajo temporal como trampolín para cambiar de empleo o mejorar el actual, una vez que ha finalizado su primer contrato legal en el país. Según la ley, al terminar éste, los trabajadores extranjeros tienen libertad de movimiento para buscar empleo en otras regiones y otros sectores, de modo que es entonces cuando estos trabajadores se dirigen a las ETT con la documentación reglamentaria para buscar empleo. Los inmigrantes que trabajan en Adecco, son pues, por ahora, personas que regularizaron su situación antes del proceso realizado este año, y hasta 2006, no se espera que esta última normalización tenga una repercusión real en la contratación de Adecco.
No obstante, en 2006 Adecco ha dejado de ser sólo una vía para los inmigrantes a la hora de cambiar o mejorar su trabajo en España, y se ha convertido además en una opción directa para encontrar un empleo desde sus países de origen. Con el Programa Inmigrante, Adecco ha dado un paso más en su política con respecto a este importante colectivo, y ha apostado por ser directamente generadora de primer empleo para los inmigrantes en España. El Programa comenzó en enero de este año y ha cerrado en marzo las primeras autorizaciones de empleo. En solo tres meses, más de 40 empresas se han puesto en contacto con Adecco, lo cual podría generar una demanda de más de mil trabajadores extranjeros.
Por tanto, para el año 2006 Adecco espera contratar un 35% más de extranjeros que en 2005, teniendo en cuenta los tres factores principales: el crecimiento continuo de este colectivo en el mercado laboral español, el proceso de regularización de empleo y la puesta en marcha del Programa Inmigrante Adecco.
Radiografía de la contratación de inmigrantes en España
Por Comunidades, la tendencia de 2004 se ha repetido en 2005: Cataluña y Madrid acapararon más del 50% de los inmigrantes contratados por Adecco en España. Sin embargo, es destacable el aumento de este colectivo en Madrid, de un 66% interanual. Así, la comunidad ha pasado a representar el 26,37% del total de los inmigrantes contratados en España, frente al 20,65% del año anterior. Este fuerte incremento se debe a la normalización de una situación que era anómala hasta el momento, ya que Madrid registraba el mayor número de inmigrantes residentes en España, un 32% del total, y en cambio sólo aportaba el 20% de la contratación de este colectivo en Adecco en 2004. La Comunidad Valenciana y Aragón ocuparon de nuevo el tercer y cuarto puesto por contratación de inmigrantes, con un 10,54% y 8%, respectivamente, sin apenas variación con respecto a 2004.
Las únicas tres comunidades que registraron descensos en la contratación de extranjeros fueron Canarias, con una caída de tres puntos porcentuales, y Murcia, con una bajada del 2,2%, debido al impacto de las heladas de este año en el sector agrario.
El perfil del inmigrante contratado por Adecco es el de un varón iberoamericano, de 26 a 35 años, con estudios elementales que trabaja en la producción. Este perfil se repite y consolida, frente al descenso del colectivo magrebí, de universitarios, de mujeres y de menores de 25 años.
Según su procedencia
En 2005, el 42,62% de los contratados extranjeros provinieron de América Latina, un 1,35% más que en 2004. Este colectivo se consolida como la mayor fuerza de trabajo en España, en detrimento de las personas procedentes del Magreb, que desde finales de los años 90 han experimentado una caída constante en número de trabajadores, hasta representar el 19,43% en el año pasado, un 2,5% menos que en 2004.
Los inmigrantes procedentes de países subsaharianos y del este de Europa representaron el 13,36% y 9,64%, respectivamente, manteniendo un crecimiento constante con respecto al año 2004.
Por último, en 2005 se observa un ligero aumento de contratación de trabajadores de la zona Asía-Pacífico de ocho décimas porcentuales hasta el 3,5%, y de los procedentes de la Unión Europea (sin incluir a nuevos países del este recién incorporados), de medio punto, hasta el 10,5%.
El Grupo Adecco trabajó en España en 2005 con 151 nacionalidades diferentes, 31 países más que en el año anterior. Sin embargo, sólo 5 de estas nacionalidades acapararon el 50% del total de los extranjeros empleados: Marruecos, con el 15,10%, Ecuador, con el 13,61%, Colombia, 9,62%, Perú, 6,20%, y Rumanía con el 4,55%. Aunque casi el 90% de los extranjeros no es comunitario, cabe destacar el peso que ha ganado Italia, triplicando el número de personas contratadas con respecto a 2004. De esta forma, Italia se ha colocado en el séptimo puesto del ránking por países, por detrás de Rumanía y Nigeria. Este importante flujo de italianos puede tener relación de forma indirecta con la doble nacionalidad que existe entre Italia y algún país sudamericano.
Según categorías laborales
El 64,4% de los trabajadores extranjeros contratados por Adecco ocupan puestos de producción. Es con diferencia la categoría laboral con mayor presencia de empleados inmigrantes, teniendo en cuenta que las empresas de trabajo temporal no pueden trabajar de forma directa en la construcción y el servicio doméstico, los dos sectores en los que más extranjeros trabajan en nuestro país. Según el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, casi el 20% de los empleados de otros países trabajaron en la construcción.
El siguiente grupo en importancia es el de trabajadores de hostelería y restauración, que representan el 15,4% del total de extranjeros empleados por Adecco, seguidos de la categoría de ventas y comercial, con un 8,1% y de la de administrativos, con un 6,7%.
La distribución de inmigrantes por categorías es similar a la registrada durante en 2004. Las variaciones más destacadas corresponden a hostelería y restauración, que han experimentado un ligero descenso de 2,6 puntos en su participación con respecto a 2004, y a técnicos y oficios, que han retrocedido 1,2 puntos en el total de trabajadores extranjeros. Por su parte, los empleados que trabajan en puestos de administración y los de producción aumentaron su participación en 0,9 y 0,6 puntos, respectivamente.
Según formación
Si bien se ha incrementado la contratación de inmigrantes un 30% en 2005, el nivel formativo de éstos ha caído drásticamente: este año, el 80,63% de los extranjeros poseía solo estudios elementales, frente al 59% que este grupo representaba en 2004.
La caída más brusca en formación se produjo entre los universitarios, que descendieron desde el 23% del total de los inmigrantes contratados en 2004 al 8,82% en 2005. De esta forma, los extranjeros contratados por Adecco se nivelan en formación con los españoles, mientras que hacía un año los trabajadores de fuera del país estaban mucho más formados que los nacionales.
De igual modo, también ha sufrido un fuerte retroceso el grupo de inmigrantes con formación profesional técnica, desde el 7,37% al 3%.
Distribución por edad y sexo
La mitad de los inmigrantes que buscan empleo en nuestro país son jóvenes de entre 26 y 35 años. La edad media del extranjero sigue siendo un lustro mayor que la del español contratado por Adecco, entendiendo como lógica esta mayor madurez debido al tiempo necesitado para el traslado desde sus países de origen.
Mientras que un 40% de los españoles contratados tienen entre 18 y 25 años, en el caso de los inmigrantes, este grupo de edad sólo alcanza el 15%, además de que en el último año, dicho porcentaje ha caído cinco puntos, frente a la subida de los extranjeros mayores de 40 años, que ha sido del 4,5%. En la contratación de Adecco los españoles mayores de 40 representan el 11%, frente al 18% que suponen los inmigrantes de esta edad.
En cuanto a la distribución por sexo, se observa una tendencia dispar entre ambos colectivos. Mientras la contratación de españoles está casi equilibrada con un 50% de hombres y mujeres, en el caso de los trabajadores extranjeros existe una diferencia entre ambos sexos: los hombres acaparan casi un 60% de los trabajos, frente al 40% de las mujeres. Además, esta diferencia se ha acentuado en los últimos dos años, ya que en 2003 la proporción era de 52,4% frente a 47%.
El paro entre los inmigrantes
El paro también es un fenómeno sufrido por los inmigrantes. En 2005, la tasa de desempleo entre los extranjeros fue del 10,2%, según el Indice Laboral de las Comunidades Autónomas Adecco-Iese, frente al 8,5% de paro entre los españoles.
Del total de los parados en el país, los extranjeros representaron un 13,6%. La tasa de desempleo entre este colectivo es diferente dependiendo de la procedencia. El índice es mayor entre los inmigrantes provenientes de Latinoamérica, Marruecos y el Este de Europa, alcanzando el 10,5%, mientras que los procedentes de otros estados de la UE sufren una tasa de paro del 8,5%, igual que los españoles.
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