Jesús Caldera, ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, ha afirmado que la reforma laboral que está en negociación entre Gobierno, patronal y sindicatos «no será pequeña, sino amplia» e incluirá más de 30 medidas que afectarán a diversos ámbitos del mercado laboral, desde los servicios públicos de empleo al sistema de bonificaciones a la contratación. Así mismo mostró su confianza en que las negociaciones queden cerradas en 15 o 20 días o un mes como máximo, y explicó que la reforma estará dirigida a elevar la calidad del empleo y la productividad.
También señaló Caldera que esta reforma buscará una adecuada combinación entre seguridad y flexibilidad, dos conceptos que «no son «incompatibles». «Si hay acuerdo, se favorecerá el equilibrio entre ambas variables», subrayó.
El ministro indicó que el futuro acuerdo sobre la reforma laboral incorporará cambios en la política de estímulos, así como una reforma «en profundidad» de las políticas activas de empleo.
Durante su intervención, en un acto sobre el modelo social europeo organizado por la Fundación Alternativas, Caldera aseguró que el funcionamiento del mercado laboral es, actualmente, «positivo», no sólo por la confianza en la economía que genera el Gobierno sino, fundamentalmente, por algunas de las reformas que se han llevado a cabo desde 1994 y que han traído más flexibilidad al mercado de trabajo. También afirmó que todo ello se ha logrado «a costa de una importante segmentación del mercado», de forma que una parte del mismo es flexible y otra más rígida.
Los objetivos que ahora quiere conseguir la sociedad española, añadió, son los de incrementar la calidad en el empleo y favorecer la incorporación al mercado de trabajo de los colectivos con más dificultades.
En relación con la reforma de la Seguridad Social, asunto que también está discutiendo el Gobierno con empresarios y sindicatos, Caldera confía en que esta mesa de negociación produzca un acuerdo «en pocos días», y que éste permita mejorar la “contributividad” del sistema. «El sistema tiene que evolucionar como evolucione la población. Hay que cotizar mejor y durante más tiempo», según el ministro.
Caldera subrayó que, aunque el crecimiento del empleo ha convertido al sistema español de pensiones en uno de los más sólidos, el problema del envejecimiento de la población hace necesarias las reformas.
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