Las horas de trabajo perdidas por huelga ascendieron a 3.920.031 en los dos primeros meses del año, lo que supone un aumento del 0,01% respecto al mismo periodo del año anterior, según el último informe sobre conflictividad laboral elaborado por la CEOE.
En enero y febrero se produjeron 266 huelgas, un 62,2% más, que afectaron a empresas y sectores con un total de 125.428 trabajadores, de los que 34.617 resultaron directamente implicados, un 7,2% más que en los dos primeros meses de 2005.
En cuanto a la conflictividad estrictamente laboral, descontando las huelgas de funcionarios y las extralaborales, hasta febrero se registraron 223 paros, con 52.231 trabajadores en plantilla, 21.062 implicados y 1,6 millones de horas perdidas, un 22,2% menos que en 2.005.
Sólo febrero se produjeron 141 huelgas, un 65,88% más, que afectaron a 58.308 trabajadores, de los que 19.768 resultaron directamente implicados, un 27,07% más.
Por áreas territoriales, la conflictividad laboral de febrero afectó principalmente a Madrid (17 huelgas), Barcelona (15), Guipúzcoa (10) y Álava, Valencia y Vizcaya (7).
Según el número de trabajadores implicados, Madrid también destacó sobre las demás provincias con 4.316 huelguistas. Después Barcelona, con 2.860, y Álava, con 971.
Los sectores de actividad más afectados por las huelgas de febrero fueron metal, extracción y transformación de minerales no energéticos y productos derivados, industrias químicas, otras industrias manufactureras, transporte y comunicaciones, construcción, y otros servicios.
Del total de huelgas registradas en febrero, 22 afectaron a empresas o servicios de carácter público y en ellas participaron 5.995 trabajadores, que perdieron 815.272 horas de trabajo.
37 huelgas se convocaron para presionar sobre las negociaciones de convenios colectivos o protestar contra la ruptura de las mismas. Éstas fueron protagonizadas por 8.000 trabajadores, que perdieron un total de 496.544 horas.
Además se produjeron 29 conflictos para reivindicar diversas mejoras fuera de convenio. En este caso participaron 4.408 trabajadores que perdieron 660.968 horas de trabajo.
Para el pago de salarios atrasados se produjeron 6 conflictos, mientras que otros 21 tenían como finalidad protestar contra la tramitación de expedientes de regulación de empleo. Por ambos casos se perdieron 160.531 horas.
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