El Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales habilitará este año, en un plazo aproximado de tres meses, una serie de ayudas económicas dirigidas a recolocar a trabajadores del textil, sector que, debido a la crisis que sufre, presenta un excedente de entre 15.000 y 16.000 trabajadores.
Más adelante, en los presupuestos del próximo año, habrá una partida específica dentro de los recursos destinados a políticas activas de empleo, para
subvencionar procesos de recolocación en sectores criticos, en reestructuración o que sean objeto de deslocalización, sumándose al textil el del calzado y el sector de la madera y el mueble.
Así lo avanzó hoy en declaraciones a periodistas el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, tras comparecer en la Comisión de Trabajo del Congreso para explicar el estado de las negociaciones sobre la reforma del mercado de trabajo.
Gómez, que precisó que estas ayudas serán gestionadas por las comunidades autónomas, afirmó que el Ministerio se encuentra analizando el impacto de la OMC sobre el sector textil, cuya situación crítica afecta especialmente a las comunidades de Cataluña (sede del Consejo Intertextil), Valencia, Castilla-La Mancha y, en menor medida, Madrid.
Entre otras cosas, el Ministerio está estudiando el volumen de empleo afectado por la situación del textil, aunque su cuantificación resulta difícil por la presencia abundante de pequeñas y medianas empresas. En cualquier caso, el secretario general de Empleo cifró en 15.000 trabajadores los excedentes actuales del sector.
El objetivo de las ayudas que habilitará Trabajo, y que se verán complementadas por líneas de crédito por parte del Ministerio de Industria, es el de mantener el mayor número de empleos y de recolocar a los trabajadores cuando no sea posible la conservación de sus puestos.
De momento, estos recursos económicos los empezará a recibir el textil, sector con el que Trabajo ultima un acuerdo y que espera tener cerrado en un plazo aproximado de tres meses. Pero en 2007 estas ayudas llegarán a otras actividades económicas en crisis o inmersas en reestructuraciones, como los sectores mencionados del calzado o del mueble.
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