El Gobierno español llegó a un acuerdo con su par senegalés para que el país africano acepte la repatriación de un millar de senegaleses. Esta noche comenzarán las repatriaciones.
Mientras tanto, el ministro senegalés del Interior, Ousmane Ngom, ha presentado los primeros resultados de la operación Frontex, lanzada conjuntamente entre España y Senegal el 7 de septiembre con el objetivo de frenar la salida de embarcaciones con emigrantes clandestinos hacia las Islas Canarias.
En una rueda de prensa ofrecida en Dakar, Ngom señaló que los centros operativos que funcionan 24 horas han hecho posible interceptar dos embarcaciones con un total de 186 pasajeros.
Las embarcaciones que abandonaron las costas senegalesas han sido detectadas gracias al avión de vigilancia italiano que participa a las operaciones haciendo posible una intervención de la marina nacional que detuvo a clandestinos y traficantes.
Todos han sido puestos a disposición de la gendarmería que se encargará de presentarles al juez con vistas su proceso, indicó Ngom en la rueda de prensa, en la que estuvo rodeado de los altos mandos de los servicios de seguridad senegaleses que componen el estado mayor mixto de la operación (marina, nacional, gendarmería, policía, ejército aéreo).
La operación ha hecho también posible la detención de un total de 31 candidatos a la emigración y dos traficantes que no han podido subir en una embarcación, al igual que otro grupo de personas que tenían que embarcar desde el poblado de Fass Boye, afueras de la capital.
El ministro senegalés aseguró que el dispositivo Frontex tendrá mejor eficacia con la salida del barco italiano que apoyará las lanchas salvavidas y el helicóptero españoles implicados en la operación.
"Seguiremos nuestros esfuerzos mientras haya tentativas de emigración clandestina", advirtió Ngom, que ha dejado claro que incluso si España decide retirarse de Senegal continuará "hasta la victoria", al opinar que para el gobierno se trata de una acción de seguridad nacional que "tiene un coste, pero no precio".
Ngom alabó la cooperación ejemplar entre España y Senegal y subrayó el hecho de que el presidente Abdoulaye Wade y el presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero comparten la misma visión del problema y la misma voluntad política de combatirlo.
Al abordar el tema de la repatriación de los miles de clandestinos que se encuentran en la actualidad en Canarias, se mostró evasivo.
España y Senegal acordaron identificar a los ciudadanos senegaleses que se encuentran ilegalmente en el territorio español, y posteriormente se tomarán las disposiciones adecuadas para organizar el regreso a su tierra, comentó Ngom.
A ese respecto, el ministro señaló que un equipo de policías senegaleses está en Canarias y una vez termine su misión se podrá plantear la repatriación en condiciones que cumplan sus derechos como seres humanos.
Recordó la postura firme del presidente Wade acerca de la emigración ilegal y su voluntad de imponer una política de tolerancia cero frente a ese fenómeno, junto a las medidas de seguridad y una política de creación de empleo como alternativa.
El plan REVA (Retorno a la Agricultura), apoyado por España con una contribución de 20 millones de euros, pone de manifiesto la determinación del presidente Wade de resolver de forma duradera el drama humano que constituye la emigración ilegal, dijo Ngom.
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