El comité de empresa de la planta de Calvo en Esteiro, en Muros (A Coruña), junto con los sindicatos UGT, CIG y CC OO, acordaron ayer la convocatoria de una gran movilización en la comarca de Bergantiños, aún sin fecha, para demandar el mantenimiento de los puestos de trabajo de la conservera gallega.
Esta convocatoria se produce tras el anuncio por parte de la familia Calvo de poner a la venta el 77,8% de sus acciones de la conservera. Esta empresa tiene dos plantas en Galicia, en A Coruña, la de Esteiro y la de Carballo donde nació en 1940.
Según informó UGT, de esta reunión también salió el compromiso de que los sindicatos y ayuntamientos de la zona fleten los autobuses que sean necesarios para que la ciudadanía de Esteiro y su comarca puedan acudir a la movilización anunciada con el fin de expresar su repulsa a la situación de incertidumbre e inquietud que están viviendo los trabajadores y sus familias desde que se anunció la posible venta de Calvo.
UGT criticó que hasta el momento la Dirección de la conservera no aclaró nada sobre la posible venta de Calvo y quiénes serían los posibles compradores, así como todo lo relativo al ámbito laboral, es decir, si se mantendrán los puestos de trabajo y cómo quedará configurada la plantilla.
MANTENER LOS EMPLEOS
El comité de empresa reiteró que apuesta por el mantenimiento de la totalidad de los puestos de trabajo y que la venta se realice de manera preferible a una empresa o grupo de empresas de capital gallego.
Además, entre los acuerdos adoptados hoy también figuran la solicitud de una reunión con el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, y otra con la familia Calvo Pumpido.
Por otra parte, los representantes de los comités de empresa de Calvo en las fábricas de Esteiro y Carballo se reunirán hoy en Santiago de Compostela con la conselleira de Pesca, Carmen Gallego, para abordar la situación actual y el futuro de la conservera.
Carmen Gallego subrayó hoy la voluntad de la Xunta de mantener la actividad y los puestos de trabajo de Calvo en Galicia, pero recordó que "hay que respetar" la decisión de la empresa gallega "de cambiar de titularidad".
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