Los huelguistas de hambre que protestan por el despido de trabajadores de Seat desde el pasado viernes en la Universidad de Barcelona (UB) acusaron hoy a los sindicatos mayoritarios de la empresa automovilística, UGT y CC.OO., de no haberlos visitado para mostrar su solidaridad.
El portavoz de los trabajadores en huelga, Diosdado Toledano, recordó que "tienen la obligación moral en tanto que compañeros". "Que no hayan venido ellos nos parece mucho más grave", señaló refiriéndose a que tampoco ningún representante de Seat se ha interesado por sus estados de salud.
Los diez trabajadores de Seat, siete despedidos y tres solidarios, mantienen desde hace tres días una huelga de hambre que ha sido controlada por dos sanitarios y acabará a las 17 horas de esta tarde, cuando tienen prevista una concentración a las puertas de la sede central de la UB.
Lo que sí han hecho los representantes tanto de Seat como de UGT y CC.OO. es volver a reunirse para reafirmar un acuerdo de contrato relevo que prevé la reincorporación de trabajadores despedidos a raíz del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) firmado por los mismos dirigentes en enero de 2006.
Ante este acuerdo, los huelguistas son pesimistas porque "no hay plazo máximo de readmisión" y, además, no garantiza que todos los despedidos vuelvan a sus trabajos. "Nosotros queremos volver a nuestros trabajos antes de Navidad", reclamó el portavoz.
Toledano dejó claro que "el conflicto no está en vías de solución". "El contrato relevo es un contrato trampa", afirmó otro huelguista, refiriéndose al despido de un compañero de 59 años despedido, justo un año antes de su prejubilación.
Diosdado Toledano aseguró que el comportamiento de la empresa automovilística "se contradice" con lo que ha firmado porque "está contratando a trabajadores de la calle en vez de a los despedidos". Toledano advirtió de que se estaban "haciendo horas extras en el fin de semana" y se ha "reducido la producción por falta de personal".
El grupo de diez huelguistas está respaldado por un comité solidario unitario formado por trabajadores, miembros de la Confederación General de Trabajadores (CGT), afiliados de CC.OO. y de otros muchos sindicatos y organizaciones.
"Esta huelga es un primer aviso que damos a la dirección de Seat", alertó Toledano. El portavoz también recordó que esta lucha "tiene una alcance más general" ya que, según Toledano, "es la primera vez que una gran empresa de Catalunya hace un acuerdo de despidos". "No queremos que los trabajadores vuelvan a firmar el despido de otros trabajadores", recalcó.
Los huelguistas dieron las gracias a todos los que les han mostrado su solidaridad, entre los que destacan trabajadores de algunas empresas también con problemas como Mercadona y representantes de ICV-EUiA y ERC, además de muchos estudiantes de la universidad que han ocupado.
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