El director general de Clickair, Alex Cruz, ha dicho que no se han planteado la adquisición de Air Madrid al estimar que un proceso de este tipo "sólo distraería" de sus objetivos a la compañía de bajo coste. Sí reconoció que la 'low cost' está realizando entrevistas a pilotos de Air Madrid y que seleccionará "a los que crea que forman parte de la cultura de Clickair". Por su parte la compañía aérea alemana LTU ha desistido de su interés por la compra de la aerolínea española.
Cruz recordó que el plan de expansión de la Clickair supone la incorporación de como mínimo un avión al mes a partir del mes de febrero, para alcanzar los 30 aparatos en 2008, por lo que "está contratando sin parar". Tras pronosticar que la compra de Air Madrid por algún otro competidor "no será un proceso fácil", el director general de Clickair consideró que la suspensión de las operaciones de Air Madrid "no ha beneficiado a nadie" y que ha creado "mal rollo en todo el sector".
Cruz señaló que el aeropuerto de Madrid-Barajas no se encuentra en los planes de expansión de su aerolínea ya que en este aeródromo "hay que entrar a lo grande". A este respecto, el director de Clickair indicó que la compañía de bajo coste se centrará en Barcelona-El Prat o en rutas desde aeropuertos como Sevilla, Valencia o Málaga.
LTU da por finalizadas las negociaciones
La compañía LTU ha dado por finalizadas las negociaciones que había mantenido durante los últimos dos días con los directivos de Air Madrid para la compra de una parte de esta aerolínea. El gerente de alemana, J’rgen Marbach, que estuvo el miércoles en Madrid para llevar a cabo una "conversación informal" para negociar la adquisición de una participación en Air Madrid ya ha regresado a Alemania, y ha dado por rotas las negociaciones.
No obstante, hay otra serie de empresas que también tienen interés en hacerse con la compañía presidida por José Luis Carrillo, y que esperan iniciar conversaciones en semanas próximas con los directivos de Air Madrid.
Entre estas empresas se encuentran Gestair, otra línea aérea del negocio de los jets privados de alquiler, un fondo de inversión y Suiftair, así como el Grupo Marsans que se mantiene a cierta distancia pero que también tiene interés en Air Madrid.
Los problemas para la venta vienen dados por las exigencias de Aviación Civil para que pueda volver a operar, de la presentación de la vía concursal (suspensión de pagos) de la aerolínea, y del precio, que si bien hace unos meses era de 120 millones de euros, ahora, según las fuentes consultadas por EFE, se ha rebajado bastante esa cifra.
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