El presidente del Unión Demócrata Ceutí (UDCE), Mohamed Alí, aseguró ayer que nunca ha pretendido acusar al Ejército de 'discriminar' a los soldados musulmanes que prestan sus servicios en Ceuta y Melilla, pero sí habló sobre determinadas situaciones producidas.
En declaraciones a los periodistas, Mohamed Alí hizo alusión al reparto de unas 3.000 octavillas por la ciudad donde este grupo -primero de la oposición en la Asamblea de Ceuta, donde tiene tres diputados- aludía a la situación que se producía en las Fuerzas Armadas con los musulmanes.
Mohamed Alí declaró que 'no he acusado al Ejército de discriminar a los soldados de confesión islámica sino que sólo he manifestado la inquietud existente por el número de rescisiones o no renovaciones de soldados musulmanes con informes de carácter reservado y nuestra disposición a colaborar con las Fuerzas Armadas'.
El presidente del UDCE dijo que no quería entrar en un 'rifirrafe' con la Comandancia General de Ceuta 'ya que nunca nos hemos manifestado sobre ningún despido por razones objetivas, sean de la naturaleza que sean'.
Añadió que su partido ha denunciado este hecho 'por la alarma social que ha generado la indefensión en que deja a algunas familias', al tener constancia de al menos diez casos de musulmanes a los que se les ha 'invitado' a abandonar el Ejército.
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