• La demanda de los estudios ha caído un tercio en los últimos cuatro años
• Los bajos sueldos y la falta de prestigio social desaniman a los profesionales
Ser informático no está de moda. Las empresas tienen dificultades para encontrar personal –sobre todo capacitado–, las universidades no cubren plazas y los adolescentes no se inclinan por el bachillerato tecnológico. En el sector han comenzado a saltar las alarmas y se han planteado hacer campañas de imagen para recuperar el prestigio social perdido y captar nuevos talentos.
"Hay pocas vocaciones. Son estudios difíciles y ahora hay más oferta de la que se absorbe. En cuatro años, la demanda por los estudios ha caído un tercio", asegura Maria Ribera Sancho, decana de la Facultad de Informática de la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC), que concentra el 68% de la oferta catalana. "Pero lo curioso es quién va a liderar la sociedad de la información si no hay informáticos?", se pregunta.
"La situación es muy grave. No solo las grandes compañías, que tienen mucha necesidad de profesionales, encuentran dificultades. Tampoco las empresas medianas consiguen gente", asegura Alfons Rubio, gerente del Col.legi d'Enginyers Informàtics de Catalunya. "Es dramático. Este año hemos fichado a más de 200 personas solo en Barcelona, pero hemos dejado 100 plazas sin cubrir", asegura Jordi Serrano, responsable de recursos humanos de Everis en Barcelona. Una opinión semejante se obtiene en Accenture, T-Systems o Indra, por citar algunos de los grandes empleadores del sector.
MÁS DE 2.000 OFERTAS
"Es una circunstancia del mercado. Ahora hay más gasto en el sector informático y, por tanto, más demanda", explica Gerardo Lara, director de empleo y selección de Indra, empresa que se ha visto obligada a contratar más personal informático después de su fusión con Azertia y Soluziona. "Los analistas programadores son los más demandados", añade.
Un rápido vistazo a Infojobs.net, uno de los portales de referencia para buscar empleo entre informáticos, arroja más de 2.000 vacantes en Barcelona y más de 4.000 en Madrid. Y lo más pedido es la experiencia en Java, SAP o sistemas Linux.
Las razones de la crisis hay que buscarlas en el fracaso de las puntocom –que desvió a mucha gente del mercado– y en los bajos salarios que han llevado a muchos programadores a cambiar de área o a emigrar. "En las TIC hay sueldos millonarios, pero para tres. Los licenciados que empiezan a trabajar son mileuristas, lo que hace que muchos se planteen hacer esta carrera, que exige tanto esfuerzo y tiene tan poca recompensa", alerta Sancho. Un programador sin experiencia empieza cobrando 15.000 euros anuales y solo se doblan al cabo de tres o cuatro años. Un gerente llega a 60.000 euros, con una media de 27 años, dice Serrano.
Pero la escasez está elevando los sueldos y obliga a las empresas buscar fórmulas para captar y retener al personal. "Hay que buscar el contacto con las universidades y con las escuelas, luego darles planes de formación y pagarles más, aunque es un tipo de profesional que valora más el proyecto que el sueldo", dice Joan-Anton Català, director de recursos humanos de T-Systems. Otros fichan como ingenieros a estudiantes y después los forman, una práctica que Català califica de "peligrosa".
POCOS ESTUDIANTES
La cantera no permite ser optimista. La mitad de las universidades que imparten las tres carreras de informática (ingeniería superior, técnicas de sistemas y gestión) ni siquiera cubren las plazas. El bachillerato tecnológico tampoco está entre los más populares, mientras que los módulos de formación profesional parecen ser los únicos que resisten el envite. "Hay una tendencia al alza. Hemos pasado de 6.119 alumnos hace dos años a los actuales 7.158. Sube el grado medio y baja el superior", señala Josep Fransi, director general de Ensenyament Professional, Artístic i Ocupacional de la Generalitat.
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