Los trabajadores y los directivos de Airbus y EADS en España pasaron la jornada de ayer recabando información sobre el plan de ajuste Power 8 que el gigante de la aeronáutica europea dará a conocer hoy en Toulouse (Francia). Los sentimientos imperantes eran los de tensión y esperanza. Las diferentes fuentes consultadas coincidían en señalar que el ajuste laboral inevitable será 'sensiblemente más suave' en las plantillas española y del Reino Unido que entre los trabajadores de Francia y, sobre todo, de Alemania.
Con la información disponible, nadie se atrevía a asegurar que hoy se dé a conocer con detalle cuál será el diseño definitivo del nuevo avión de Airbus, el A-350, para las rutas de largo radio. A la hora de anunciar el ajuste, en todo caso, las fuentes citadas consideran que es imprescindible que se baraje en términos generales cuál será el reparto de la carga de trabajo en ese modelo de avión, que es clave para el futuro de la capacidad competitiva de Airbus frente a Boeing.
Fuentes fiables han señalado que la industria española, especializada en la tecnología de construcción aeronáutica en fibra de carbono, puede aspirar a conseguir una participación incluso superior al 12% en este avión. Señalan que su rival en Boeing, el 787, ha entrado ya en la planta de montaje con un porcentaje de materiales compuesto en su fuselaje que supera el 50%. Explican que Airbus va a ser más conservadora en el uso de estos nuevos materiales, teniendo en cuenta los problemas de torsión que el constructor estadounidense se está encontrando. En todo caso, los mayores expertos en fibra de carbono (con muy poco peso y unas menores exigencias de mantenimiento) se encuentran en España, lo que permite augurar un fuerte protagonismo nacional en el proceso de fabricación del A-350.
Clos
En medio de este ambiente con sentimientos encontrados, el propio ministro de Industria, Joan Clos, insistió ayer en que el plan de ajuste en Airbus no afectará a la fábrica que la compañía tiene en Puerto Real (Cádiz), en la que trabajan cerca de 500 personas, tal y como publicaron alguno medios europeos la semana pasada.
Clos explicó que las reducciones de plantilla que se esperan afectarán más a los servicios administrativos y no a los servicios de fabricación. En este sentido, señaló que 'precisamente' es en la fabricación donde Airbus está demandando un incremento de la producción de piezas para el modelo A-320, en concreto, 'que se incremente la producción de 29 a 34 aviones diarios'.
Según informaciones publicadas ayer por la prensa francesa y alemana, la reestructuración que se pondrá en marcha supondrá la venta de las plantas de Varel y Nordenham en Alemania, y las de Saint-Nazaire Ville y Meaulte en Francia, con una reducción de plantilla de 3.500 trabajadores en el caso germano y de 4.500 en el galo.
El Power 8 se discutirá hoy con el comité de empresa europeo de Airbus. Después se harán públicos los detalles del mismo. Según EADS, el plan permitirá a Airbus 'afrontar mejor el reto de la debilidad del dólar, la carga financiera relacionada con los retrasos del A-380, así como la necesidad de inversiones en el futuro'.
Las medidas recogidas en el plan contribuirán con 2.100 millones de euros al resultado operativo (Ebit) de Airbus en 2010 y permitirán 5.000 millones adicionales de cash-flow acumulado en el periodo 2007-2010. La próxima generación del A-320 sería responsabilidad de la planta de Hamburgo, según la prensa gala.
La reacción de los sindicatos ante el ajuste que se avecina no se ha hecho esperar. La Federación Europea de Metalúrgicos (FEM) acordó realizar una 'acción europea conjunta' de protesta que tendrá lugar antes del 20 de marzo.
Desde España, la central sindical CC OO ya ha anunciado su apoyo a la medida. Las organizaciones de la FEM (que incluye a las que cuentan con representación en EADS) pactaron la creación de una plataforma conjunta desde la que exigirán que el 'contenido, alcance y calidad' del ajuste del Power 8 deben ser negociados con los sindicatos.
'El plan no debe conllevar ningún despido forzoso ni el cierre de ninguna planta. Debe garantizarse la continuidad de la producción en todas las plantas así como la preservación de todas las actividades (ingeniería, producción y servicios)', advirtieron.
Financiación
Una de las claves del presumible incremento de la carga de trabajo de la industria nacional en el nuevo avión de Airbus se encuentra en la disponibilidad de las administraciones central y autonómicas españolas a financiar su costoso desarrollo.
Pesimismo en Francia y en Alemania
En Francia, el nerviosismo empezó ayer a adueñarse de los trabajadores de las plantas de Saint Nazaire y de Méaulte, al norte del país, en espera del anuncio de los detalles del plan de ajuste, informa Sara Acosta desde París. Estas dos fábricas estarían entre aquellas que el constructor aéreo pretende externalizar total o parcialmente, junto a Nordnham y Varel, en Alemania.
La planta de Toulouse junto a la de Hamburgo esperan quedarse con el ensamblaje final del A-350.
Los trabajadores de la planta francesa de Méaulte (1.700 empleados) protagonizaron ayer un paro espontáneo que comenzó en un taller mecánico.
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