Después de 25 años de vida, el diario El Financiero enfrenta una crisis sin precedentes que lo tiene al borde de la quiebra
Los problemas comenzaron cuando la dirección del diario dejó de pagarles su salario y, peor aún, su aguinaldo correspondiente a 2006.
Empleados despedidos, que omitieron sus nombres, señalaron que la dirección de El Financiero les dio a conocer su destitución, y les informó que no les entregaría sus liquidaciones porque “no tiene dinero”.
Semanas antes, El Financiero, agobiado por la carga de pasivos y falta de liquidez, decidió emprender una “reestructuración”, contra la voluntad de sus trabajadores.
A fines de febrero pasado, El Financiero empezó a ser editado por la empresa Servicios Periodísticos Profesionales (SPP), que asumió como único objetivo la edición del periódico y la propiedad del cabezal.
Se informó que El Financiero se mantendría como responsable de los pasivos fiscales, de seguridad social, vivienda, afores y acreedores privados, entre otros adeudos.
Antes de llegar a esa determinación, la directora del diario, María del Pilar Estandía González Luna, viuda del anterior director del rotativo, Rogelio Cárdenas Sarmiento, se reunió con la plantilla de reporteros y trabajadores, los cuales le habían enviado una carta en la que le demandaban el pago completo de aguinaldos, y el pago regular de sus salarios, que venían sufriendo un retraso de dos a tres semanas, según publica El Proceso de México.
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