La dirección de Volkswagen dio ayer por sentado que habrá un recorte de plantilla en Seat. "Lo vamos a hacer siguiendo el estilo de Volkswagen", afirmó el responsable de personal del grupo alemán, Horst Neumann, en relación a la supresión de empleos en la filial española. Neumann defendió la utilidad de las prejubilaciones "con apoyo estatal" como principal medida no traumática para reducir los efectivos de Seat.
Por primera vez, los directivos de Volkswagen hablaron claramente de un recorte de plantilla en la fábrica de Martorell. Hasta ahora, el presidente de Seat, Erich Schmitt, había mantenido en público que el ahorro de costes deseado no implicaba necesariamente la supresión de puestos de trabajo. Las prejubilaciones son, precisamente, uno de los puntos principales de la negociación en marcha entre la dirección y los sindicatos de Seat, que han planteado que se lleven a cabo unas 1.000 bajas de trabajadores a partir de los 58 años, según publicó el jueves EL PERIÓDICO. El plan puede afectar a unas 1.200 personas, el 10% de la plantilla en unos dos años.
El responsable de personal de Volkswagen se refirió a la "enorme presión" de las fábricas del grupo debido a la instalación de competidores asiáticos en Europa oriental con unos costes de producción muy bajos.
El presidente del primer fabricante europeo de automóviles, Martin Winterkorn, concretó algo más los objetivos que ha puesto al máximo responsable de Seat, Erich Schmitt. Dio un plazo máximo de dos o tres años para que Seat dé la vuelta a las pérdidas registradas durante dos ejercicios consecutivos y aporte beneficios al grupo. Para eso, la marca española tiene que reducir los costes, aumentar la productividad y la penetración en los mercados y ser líder de ventas en España, donde ahora ocupa la tercera posición por detrás de Citroën y Renault.
RESULTADOS INSATISFACTORIOS
Aunque Winterkorn se mostró ayer como un entusiasta de la marca española, admitió que no puede garantizar plenamente que nunca venderá la filial. "Hemos sentado las bases para que la marca sea más efectiva", aseguró en relación con la aprobación de un plan con una inversión anual de 450 millones de euros y dos nuevos modelos, cuya producción en Martorell está supeditada al recorte de gastos. Volkswagen advirtió ayer de que los resultados de Seat son "insatisfactorios".
La otra fábrica de Volkswagen en España, situada en Pamplona, necesita también aumentar la producción con un plan de reducción de gastos. Francisco Javier García Sanz, responsable de compras en la dirección de Volkswagen, consideró "inaudito y tercermundista" que en dos años no hayan podido llegar a un acuerdo sobre el convenio colectivo con los sindicatos de Pamplona, y advirtió de que próximamente se tomarán decisiones sobre el lugar de producción del nuevo Polo, al que aspira la planta española.
Volkswagen, que en el 2006 ganó 2.750 millones de euros, se halla en pleno proceso de reducción de plantilla y de costes. En los próximos dos años, dejarán las plantas alemanas, con prejubilaciones y bajas incentivadas, 5.000 empleados sobre un total de reducción de plantilla de 20.000 puestos. En Bruselas, acaba de firmar un acuerdo para suprimir 3.000 empleos y reducir un 20% los costes laborales.
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