UGT investiga el despido de 184 trabajadores de diversas empresas encargadas de la construcción de la Autovía del Mediterráneo en su tramo La Herradura-Taramay, paralizadas por el juez que investiga la muerte de seis obreros en noviembre de 2005.
El secretario provincial de MCA-UGT, Francisco Ruiz Ruano, manifestó a Efe que la UTE La Herradura, adjudicataria de las obras, sostiene que ya han finalizado los trabajos específicos -como fijación de terrenos o aseguramiento de bancadas- que autorizó el juez en la zona, por lo que hasta que no haya un nuevo permiso judicial para acometer otras actuaciones se ve obligada a despedir a los empleados y a las subcontratas.
Los trabajos pendientes tendrían una duración aproximada de un año, según indicó la UTE a UGT, pero, para acometerlos, el Ministerio de Fomento debe solicitar autorización al juez instructor.
Según Ruiz Ruano, la adjudicataria se ha comprometido a contratar a todos los trabajadores a los que ahora se les ha extinguido el contrato si recibe este permiso para trabajar.
El dirigente sindical apuntó que están investigando lo ocurrido y 'contrastando información' ya que, de comprobar que la versión de la patronal no es cierta, UGT denunciará los despidos 'ante la autoridad laboral'.
Hasta ahora sólo se mantiene en la zona una cuadrilla de seguridad para evitar que alguien acceda a la zona y pueda sufrir algún percance.
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