La dirección del grupo siderúrgico ThyssenKrupp sólo tiene previsto ofrecer recolocaciones, en un principio, a 100 de los 300 trabajadores con que cuenta la fábrica de su filial ThyssenKrupp Bilstein Ibérica en Villaverde (Madrid), que el consorcio va a cerrar.
La factoría forma parte de la sección de automoción del grupo y se dedica a la producción de barras estabilizadoras y muelles helicoidales para suspensión de turismos y vehículos ligeros.
Fuentes sindicales explicaron que la propuesta de la empresa dejaría en la calle a alrededor de 80 trabajadores menores de 52 años, que no podrán acogerse a las medidas incluidas en el plan social pactado con la empresa en noviembre de 2006.
Entonces, los responsables de ThyssenKrupp y los sindicatos llegaron a un acuerdo que dejaba abierta la continuidad de la actividad de la planta de Villaverde a cambio de un plan de reducción de plantilla basado, sobre todo, en prejubilaciones y bajas incentivadas que reducirían a 180 el número de trabajadores. El plan también preveía recolocaciones dentro del grupo y en empresas externas.
La continuidad de la actividad de la planta estaba condicionada a que se realizara 'en un nuevo emplazamiento dentro de la Comunidad de Madrid' que permitiera una 'posible expansión futura del negocio'. Para ello, las partes encargaron a técnicos independientes un informe que debía definir las condiciones exigibles para la viabilidad de un proyecto industrial.
La conclusión del estudio es que la actividad de ThyssenKrupp Bilstein Ibérica sólo es posible en un centro con unas condiciones de estructura y plantilla similares a las existentes en la otra planta de la filial en España, que está en Alonsotegi (Vizcaya). El centro vasco será el que asuma la producción de muelles y barras estabilizadoras de Villaverde. La empresa prevé completar el cierre de la planta madrileña en un año.
Sindicatos y responsables de ThyssenKrupp tienen previsto reunirse hoy para concretar las mejoras del plan social de noviembre que ha prometido la empresa tras confirmar su decisión de cerrar Villaverde, con el fin de lograr un cierre organizado y con paz social. Las centrales tratarán de que las recolocaciones se extiendan a los 80 trabajadores que quedarían fuera del plan.
Desde el grupo alemán explicaron que su intención es concluir la negociación esta semana y garantizar 'el máximo empleo posible'.
Traslados a Bilbao y prioridad de contratación
Las salidas que se van a ofrecer a los trabajadores afectados por el cierre de la fábrica de Villaverde pasan, en su mayor parte, por Bilbao. ThyssenKrupp tiene previsto ofrecer un puesto de trabajo a 80 o 90 empleados de Madrid en la planta de Alonsotegi, que asumirá la actividad del centro que cierra. Los sindicatos quieren negociar las condiciones concretas de estos traslados. ThyssenKrupp también ofrecerá formación para facilitar recolocaciones en otras empresas del sector.
La compañía prevé que los trabajadores que no se puedan recolocar y salgan con bajas indemnizadas tengan preferencia durante tres años en las nuevas contrataciones que el grupo alemán haga en España, según fuentes sindicales.
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