La constante presión tanto laboral como familiar provoca que el 30 por ciento de las parejas chinas de mediana edad dejen a un lado su vida sexual, según una encuesta publicada el día uno por el diario "China Daily".
El estudio, el primero de su tipo que analiza los comportamientos más íntimos de las parejas chinas, ha sido realizado de forma conjunta por la firma farmacéutica estadounidense Eli Lilly y el Centro de Comunicación Poblacional de China, con sede en Beijing.
Tras entrevistar a 32.906 personas provenientes de diez grandes ciudades chinas, el sondeo indica que las parejas de la parte continental de China manifiestan una escasa comunicación en su vida diaria y valoran negativamente su vida sexual.
El 30 por ciento de los ciudadanos chinos de mediana edad y 25 por ciento de los jóvenes menores de 30 años han abandonado su vida sexual como resultado de problemas físicos y sicológicos derivados del estrés.
Si bien el 46 por ciento de los encuestados sostiene que una vida sexual satisfactoria beneficia la intimidad de la parejas, la mayor parte reconoce que sus relaciones sexuales se han deteriorado tras el matrimonio.
En torno al 45 por ciento de los entrevistados señalan la presencia de disfunciones sexuales en los hombres, quienes, en un 76 por ciento, manifiestan sentirse frustrados.
El 37 por ciento de los entrevistados señalaron que el estrés diario, relacionado con la educación de los hijos, las dificultades económicas y la atención hacia los padres, genera una disminución en la comunicación entre las parejas.
De acuerdo con Qiu Xiaolan, experto de la Asociación China de Sexología, una vida sexual activa y una buena comunicación son esenciales en cualquier relación amorosa, mientras que el estrés laboral y las disfunciones sexuales se sitúan como elementos que debilitan, cada vez en mayor medida, la estabilidad familiar.
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