Los empleados de Air Madrid han cobrado una indemnización de 28 días por año, con lo que esta semana concluyó el expediente de regulación de empleo (ERE) de la compañía, informaron ayer representantes de los trabajadores.
Además de la indemnización, los empleados de Air Madrid han recibido el sueldo correspondiente al período de aprobación del expediente y el doble del salario mínimo interprofesional para los 30 días comprendidos entre el 11 de febrero y el 11 de marzo.
Según las fuentes, los pagos se han hecho "a buen ritmo", por lo que toda la plantilla ya ha cobrado su indemnización, y sólo quedan por pagar algunas cantidades de salarios sobre las que no hubo acuerdo y pueden ser objeto de reclamaciones.
En cuanto a la recolocación de la plantilla de Air Madrid, las fuentes indicaron a Efe que cerca de 200 trabajadores se han incorporado, entre otras, a la compañía de bajo costo británica EasyJet, varios pilotos a Qatar Airways y más de 200 a Air Comet.
Esta última aerolínea, perteneciente al grupo Marsans, adquirió un compromiso con el Ministerio de Fomento para la contratación del 53% de los empleados de Air Madrid, 578 del total de 1.089 de la plantilla en el momento del cierre de sus operaciones el pasado 15 de diciembre.
Los trabajadores acusan a Air Comet del incumplimiento del acuerdo, mientras que la aerolínea se defiende con que aún no ha finalizado el plazo previsto para la recolocación, a finales de abril.
Según fuentes de Air Comet, la incorporación a esta compañía no es obligatoria y muchos trabajadores renuncian a ella por haber encontrado trabajo en otras empresas y, además, matizan que sí han cumplido su acuerdo con Fomento, aunque sin llegar al objetivo numérico fijado en fechas determinadas.
Fuentes de Air Comet, que sitúan en casi 300 el número de personas recolocadas, aunque no precisarán la cifra exacta hasta finales de abril, señalan, asimismo, que la plantilla de Air Madrid resultó ser inferior a la estimada al principio del proceso y en realidad no supera las 800 personas.
Por otro lado, los representantes de los trabajadores indicaron que la imputación al presidente de Air Madrid, José Luis Carrillo, y a otros tres altos cargos de la línea aérea, por un presunto delito de estafa, no afecta a la plantilla de la compañía, que se encuentra ya totalmente desvinculada de la empresa desde el ERE.
En cambio, este procedimiento penal, abierto por el Juzgado número 3 de la Audiencia Nacional de España, afecta a los acreedores de Air Madrid, cuyo concurso tramita, en paralelo, el Juzgado de lo Mercantil número 5 de Madrid.
Este procedimiento civil está pendiente de que la administración concursal presente, antes del próximo 20 de abril, plazo prorrogable en un mes más, el informe patrimonial de la compañía, donde se reflejarán los datos definitivos de los perjudicados por la suspensión de las operaciones de la aerolínea.
De acuerdo con fuentes jurídicas, Air Madrid ha presentado, por su parte, un convenio de acreedores que contempla un proceso de liquidación en tres fases.
Los pasajeros perjudicados recibirían el importe de sus billetes a principios de 2008, con el aval del presidente de la compañía, mientras que la liquidación de los créditos ordinarios tendría el siguiente calendario: el 50% de quita el primer año; el 10%, al tercero, y el 40%, al quinto.
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