Los responsables afirman que los problemas van camino de subsanarse
La Federación de Servicios Públicos de la Unión General de Trabajadores (FSP-UGT), la Confederación General del Trabajo (CGT) y el Sindicato Libre de Correos han denunciando irregularidades laborales en el Centro de Tratamiento Automatizado (CTA) de Correos, en el Parque Tecnológico de Llanera.
Una situación que, afirman, se lleva dando desde hace un año y de la que los sindicatos destacan la falta de seguridad e higiene, la declaración de jornada laboral de lunes a viernes, el carácter voluntario del trabajo en los días festivos, así como la elaboración de un programa que identifique las funciones de cada trabajador.
Los sindicatos han solicitado por ello una nueva evaluación de riesgos tras el inicio del proceso de modernización de la empresa en 2004. Y es que, según los trabajadores, con la llegada de nueva maquinaria automatizada disminuyeron las condiciones de espacio pero aumentaron el ruido y la contaminación. Asimismo, plantean que mientras en Asturias se reclama un horario laboral de 37,5 horas distribuidas de lunes a viernes, en otros centros de tratamiento como el de Bilbao ya trabajan de esta manera.
Los responsables del CTA aseguran que la empresa «no puede alterar el régimen de trabajo pactado para todos al abrigo del convenio colectivo que obliga a trabajar uno de cada tres sábados». Asimismo, el responsable de logística, José Luis Menéndez, aclaró que la nueva evaluación de riesgo ya está solicitada y que problemas frecuentemente denunciados se están resolviendo, como el bloqueo de las puertas de emergencia. También destacó que muchos problemas quedarán subsanados con la ampliación de la actual nave.
Los sindicatos denunciaron también que con la transición de sociedad estatal a sociedad anónima se ha perdido la distinción de las funciones de los trabajadores, lo que ocasiona agravios comparativos, ya que «la misma función puede realizarla un funcionario de la empresa y un trabajador eventual cobrando sueldos distintos». Además destacaron que «el tráfico de influencias» está poniendo en riesgo las negociaciones desde el inicio, matizaron.
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