La candidata socialista a la presidencia francesa, Ségolène Royal, calificó de "provocación" y de "escándalo" la indemnización millonaria recibida por el ex presidente de Airbus, Noël Forgeard, cuando abandonó el consorcio europeo en 2006.
Forgeard cobró un total de 8,4 millones de euros en concepto de pre-aviso, indemnización de despido y de no competencia durante dos años, según la prensa francesa.
Ante la polémica suscitada por una indemnización que contradice la filosofía del plan de reestructuración 'Power 8', programa que acabará con 10.000 empleos del gigante aeronáutico, Royal pidió a los dirigentes de Airbus su retirada en unas declaraciones a la televisión France 2.
Presentado el pasado 28 de febrero, ese plan prevé una reducción de plantilla en Alemania y Francia principalmente, aunque España se verá afectada con la pérdida de 400 empleos. Provocado por la crisis del 'Superjumbo' A380, el objetivo es reorganizar la estructura de Airbus para favorecer la integración y externalizar hasta la mitad de sus actividades, con lo que se espera ahorrar 5.000 millones de euros hasta 2010 y 2.000 millones suplementarios anuales a partir de esa fecha.
Tras recordar que el Estado francés es accionista, Royal criticó que "habría podido oponerse a esta forma de actuar", en alusión a la indemnización millonaria de Forgeard.
Royal, que encara la recta final de las elecciones francesas (22 de abril-6 de mayo), prometió que si es elegida presidenta de la República hará pública la remuneración de los altos dirigentes de las empresas en las que el Estado francés es accionista.
"El Estado pondrá en marcha auténticas políticas industriales y no tolerará que los dirigentes que han fracasado se vayan con la caja mientras que los asalariados pagan los platos rotos", añadió.
Los comentarios están cerrados.