Un centenar de inspectores de trabajo y subinspectores de empleo y seguridad social se manifestaron hoy ante el Ministerio de Trabajo para exigir el cambio de la aplicación informática 'Integra' que consideran 'ineficaz' para llevar a cabo sus cometidos.
El presidente del sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social (SITSS), Carlos Moyano, y el presidente de la Federación Estatal de Subdirectores de Empleo y Seguridad Social (FESESS), Angel Cid, encabezaron la manifestación, cuyo lema fue 'por la seguridad, dignidad y eficacia de la inspección de trabajo'.
En declaraciones a EFE, Moyano dijo que el problema del sistema 'Integra' no se trata solo de una aplicación informática que funciona mal.
El 'enorme problema', explicó, radica en que no se puede utilizar para hacer actas de liquidación de cuotas de la Seguridad Social o propuestas de liquidación de cuotas, lo que significa que miles de trabajadores se pueden ver perjudicados en su derecho a prestaciones de seguridad social o pensiones.
Tampoco permite levantar actas de empleo ilegal de trabajadores extranjeros, 'lo cual implica que no podemos combatir el tráfico de mano de obra donde hay un fraude, como ocurre, por ejemplo, en la plaza Elíptica de Madrid'.
El sistema implica, según afirman los sindicatos, que inspectores y subinspectores en vez de estar en los centros de trabajo y en la calle para luchar contra el fraude 'estemos haciendo trabajos burocráticos y de oficina'.
La aplicación informática, que durante un año ha estado en fase 'experimental' ha supuesto una inversión de 4 millones de euros, y ahora 'son incapaces de darse cuenta del error que están cometiendo', afirmó el presidente de FESESS, Angel Cid.
Ambos sindicatos también reivindicaron hoy un modelo de sistema de inspección común a toda España para garantizar la igualdad ante la ley y el cumplimiento de la promesa de reconocimiento profesional que el Ministerio 'prometió' acometer en 2005 para elaborar la relación de puestos de trabajo y todavía no se ha hecho.
Durante la concentración, los inspectores y subinspectores de trabajo pidieron la dimisión del director general de la inspección de trabajo, Raimundo Aragón, por lo que consideran una 'maniobra antisindical intolerable'.
Moyano y Cid acusaron a Aragón de 'arrogarse' una facultad que no le corresponde y de intentar suplantarles el viernes 20, cuando envió un correo a todos los inspectores y subinspectores de España diciéndoles que se suspendía la concentración de hoy, 'lo que ha podido provocar que no vinieran más compañeros'.
La actitud de Moyano, dijeron, contrasta con la del ministro, Jesús Caldera, quien ha manifestado a los dos sindicatos su voluntad de diálogo.
Fuentes del Ministerio de Trabajo, señalaron a EFE que este correo enviado por Aragón fue rectificado con posterioridad mediante otro correo, que también fue dirigido a los presidentes de los dos sindicatos.
En este correo, el director general de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social mostraba la 'entera disposición' del Ministro para celebrar una reunión y abordar las cuestiones que resulten de interés común para inspectores, subinspectores y Ministerio.
El texto especificaba que 'ante el paso que damos con nuestra oferta de abrir de forma inmediata un proceso de diálogo, entendemos que debe desconvocarse la concentración que teníais previsto realizar el próximo 24 de abril'.
Aragón manifestó en el correo que la mejor solución para los intereses del colectivo se alcanzaría por la 'vía del diálogo y no de la confrontación', pedía a los sindicatos la confirmación de la desconvocatoria de la concentración y añadía que obtuvo respuesta.
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