La Federación Asturiana de Empresarios (FADE) ha negado las acusaciones del sindicato UGT, que les acusó de "precarizar las condiciones de trabajo o abaratar los costes laborales" con la firma de un convenio de colaboración que posibilitará el que las empresas puedan contratar trabajadores extranjeros que respondan al perfil profesional que requieren, cuando éste no pueda encontrarse en Asturias.
El convenio de colaboración lo ha firmado FADE con las empresas Migralex y Bamsa Global.
Su único objetivo, según la Federación, es "facilitar la entrada de trabajadores inmigrantes en Asturias de forma totalmente legal, con un puesto de trabajo asegurado, en las condiciones que para cada puesto especifique el convenio colectivo correspondiente y con un nivel de formación y de ayudas a la inserción que no existe en otro tipo de acuerdos de entrada de inmigrantes en España".
Todos los casos en los que se han planteado posibles ofertas de empleo a inmigrantes, continuaron, "han ido precedidos de una infructuosa búsqueda en el Servicio Público de Empleo asturiano (y de ello procedemos datos suficientes)". Recordaron que el listado de ocupaciones de difícil cobertura es elaborado por el Servicio Público de Empleo estatal, previa consulta al Servicio Público de Empleo asturiano, de cuyo consejo rector, siguieron, forma parte UGT. "Resulta sorprendente que ahora se invalide o se ponga bajo sospecha dicho listado, que reconoce públicamente el problema y habilita para la contratación de trabajadores no comunitarios". La UGT les acusó de convertir con este convenio "en más precarias las condiciones de trabajo y de abaratar los costes laborales". El sindicato también insinuó que la FADE buscaba trabajadores extranjeros porque "se consideran más sumisos y adecuados para satisfacer las expectativas de los empresarios".
La organización empresarial dice que es al contrario, que "se trata de dar oportunidades de trabajo dentro del marco legal y laboral existente en España a personas que, además, han recibido formación adecuada e información explícita sobre la realidad laboral con la que van a encontrar".
FADE además contraatacó diciendo: "Quizá UGT esté más interesada en que se produzcan regularizaciones de hecho de inmigrantes que han llegado de forma ilegal, sin formación y sin ningún tipo de garantía jurídica y laboral" y agregó que por su parte tenían muy claro "cuál es su propia opción en relación con este tema".
FADE asegura que está actuando dentro de la legalidad vigente, "y sin deslealtad alguna para organismos y agentes sociales".
La Federación dice también tener claro que su objetivo consiste en "garantizar la cobertura de las necesidades de mano de obra de las empresas asturianas, que no pueden ver cómo de forma sistemática sus ofertas de empleo quedan sin cubrir".
En opinión de FADE lo que están haciendo es en resumen "ofrecer colaboración y consenso para resolver problemas que afectan al colectivo empresarial asturiano y, con ello, contribuir a una Asturias más próspera".
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