Decenas de trabajadores de General Electric (GE) Power Controls se concentraron ayer a las puertas de la fábrica de Terrassa (Barcelona) en protesta por el cierre de esta instalación, medida que supondrá el despido de 151 personas, según informaron fuentes sindicales.
Los manifestantes, que aprovecharon el tiempo de descanso del turno de mañana para convocar esta movilización, cortaron al tráfico durante media hora una de las calles adyacentes al recinto fabril.
La dirección de GE Power Controls, compañía perteneciente a la multinacional estadounidense General Electric, anunció a finales de marzo sus planes de cerrar las plantas de Terrassa y Móstoles (Madrid), y el traslado de parte de la producción a Polonia y Hungría.
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